「𝗠𝗚𝗚」La vida de Jungkook dio un cambio drástico al enterarse de que Taehyung, su amigo de años, tenía sentimientos amorosos por él.
Sin embargo, en su mente se desataba una gran disyuntiva, porque a Jungkook le gustaba gustarle a Taehyung, pero...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jungkook frunció el ceño cuando miró los cuadernos en su mesa. Miró a Taehyung mirarlo con algo de timidez y, a unos pasos detrás de este, se encontraban Jimin y Seokjin como guardaespaldas de Taehyung.
—¿Sucede algo? —preguntó confundido por toda la situación.
Taehyung tragó saliva y bajó la cabeza, no sabiendo como abordar el tema. Seokjin al ver eso, se acercó al chico y sonrió de manera política, —Taehyung vino a devolverte todas tus tareas.
Jungkook miró los cuadernos con sorpresa, —¿Terminaste todo?
—No —intervino Jimin—. Taehyung no ha terminado ni terminará nada.
El menor de todos apretó su mandíbula y revisó las libretas, mirando por sí mismo que no estaban resueltas sus tareas. Asintió despacio y miró a cada uno; primero a Jimin, luego a Seokjin y, por último, a Taehyung, quien no le devolvió la mirada en ningún momento.
—No hay problema —dijo suave, captando la atención de Taehyung, y sonrió—. Puedo hacer mi tarea. No estoy enojado contigo, Tae, no me mires así.
Tanto Jimin como Seokjin fruncieron el ceño por la actitud de Jungkook para con Taehyung, y se abstuvieron de rodar los ojos cuando miraron cómo el rubio caía nuevamente ante los encantos del castaño.
—Aclarado todo el tema, ¡Taehyung, salgamos a comprar dulces antes de que empiecen las clases!
Jimin tiró del brazo a Taehyung y Seokjin los siguió, necesitando urgentemente una conversación sobre No Volver A Caer Por Jungkook.
—No traje dinero hoy, ¿Me compran un pastel de fresa? —dijo Taehyung siendo arrastrado, ignorante del verdadero motivo de esa pequeña huída.
—Te voy a regalar unos buenos golpes si sigues así de idiota, Kim Taehyung.
—¿¡Ah!?
—Apoyo la moción.
—¡Jimin, no te le unas!
Una vez llegaron a la máquina expendedora, los tres se detuvieron y los dos mayores se encargaron de juzgar con la mirada a Taehyung.
—¿Por qué me miran así? —preguntó Tae sin entender.
—Taehyung, nosotros no estaremos contigo durante las clases, así que debes ser fuerte y no caer tan fácilmente por todo lo que haga Jungkook.
El chico rodó los ojos, —Jin, yo no caigo tan fácil.
—Te habló bonito y ya estabas comiendo de su mano, no seas imbécil —dijo Jimin, pegándole en la frente—. Así que ya sabes, tú firme y ya. Intenta tratarlo como antes, cuando sólo eran amigos.
—Aún somos amigos.
—Pero sin llorar, eh.
Ahora fue el turno de Seokjin de pegarle a Jimin por decir esos chistes a Taehyung.
