Enamorada de un Delincuente.

∞7

☆☆☆ Tn

Desperté poco a poco por la luz que entraba en mi cuarto, mis ojos se iban acostumbrando a esta, una vez logrado mire a mi alrededor, era claro que estaba en mi cuarto. Volví a cerrar mis ojos hasta que sentí una mano, los volví a abrir de golpe y vi la mano de Suga, estábamos muy pegados, de inmediato sentí como mis mejillas se ponían rojas.

Voltee ligeramente para ver a Suga y este aún dormía, me gire sin hacer tanto escándalo, al fin podía ver de cerca la cara de Suga, se veía muy lindo con su cabello alborotado y sus labios entre abiertos, viendo su cara vi la cicatriz que tenía, ligeramente pase mis dedos por esta, fui bajando hasta sus labios, los delinee con las yemas de mis dedos.

Miraba fijamente sus labios, sentí como mi corazón latía muy rápido, comencé a sentir calor, quería rosar sus labios con los míos, sabía que estaba mal pero tan solo lo quería hacer una vez. Así que me armé de valor y me comencé a acercar de manera lenta, subiendo mi mirada de manera rápida para ver que estuviera dormido.

Estando segura de que aún dormía rompí esa distancia, juntando nuestros labios de una manera muy ligera, sin hacer movimientos, solo sintiendo sus labios, me separé de ellos esperando ya no tener el deseo de besar los, eso fue en vano cuando sentí el deseo de volverlo a besar.

Quería besarlo otra vez, pero quería que él también me besara, solo miraba sus labios y lamia mis labios, los cuales aún tenían el sabor de los suyos.

Suga: ¿por qué te detienes? (En ese mismo instante me asusté).

Me intenté alejar, fue en vano cuando Suga me acercó más a él, apretando ligeramente mi cintura, abrió los ojos y se me quedó viendo fijamente.

Suga: si me besas por lo menos espera a que este despierto (desvíe la mirada).

Tn: yo em n-no te-tenia planeado be-besarte (estaba súper nerviosa, sentía mis mejillas arder).

Sentí su mano en mi cadera y como me acercaba hacia él, lo mire y el estaba viendo mis labios y esta vez volví a cerrar los ojos.

Estaba deseando que lo hiciera, tenía miedo a que hiciera lo mismo de ayer, ese pensamiento se esfumó tan rápido como vino, ya que Suga me estaba besando, subí mi mano a su mejilla y ahí fue cuando el beso se intensificó más.

Movíamos nuestros labios, tenía la necesidad de más y fue cuando Suga introdujo su lengua de una manera ligera, trataba de copiar sus movimientos de manera torpe, hasta que finalmente me acostumbré a ellos.

Suga me abrazaba con fuerza y rompió esa distancia, juntando nuestros cuerpos totalmente. Estaba fascinada por el beso, este chico si que sabe besar, sentía que el tiempo pasaba lento, luego el beso fue bajando de intensidad, separamos nuestros labios y yo lamí los míos, joder sabían tan genial.

Tn: creo que si tienes razón (me miro confundido) lo de despertarte si te quiero besar.

Suga: entonces estamos de acuerdo en algo (sonreí por su comentario).

Tn: besas muy bien he.

Suga: tú no besas nada mal (que bueno escuchar eso).

Era el primer beso que implicaba algo más que los labios y esperaba que no fuera tan mala haciéndolo. Sonó la alarma rompiendo ese momento tan hermoso y regresando me a la realidad.

Gire mi cuerpo aún estando abrazada por Suga y apague la alarma, eran las 7 de la mañana.

Suga: ¿no crees que es muy temprano para levantarnos?