Breve descripción de mi persona

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Mi nombre es Giuliana. Un nombre relativamente normal, pero no todo el mundo sabe escribirlo. Antes no me gustaba, pero ahora sí, es bellísimo, al igual que todos los nombres. Mido 1.63 cm, nací en Coronel, Chile, tengo 18 años cumplidos y muchos más por vivir. Mi familia es de 5 personas, mi hermano mayor no vive con nosotros, pero nos visita de vez en cuando. No tengo una buena relación con mi padre desde que tengo 11 años y más raciocinio. Mi madre trabaja mucho más de lo que debería, por lo que tampoco hablamos mucho, pero la quiero de todas formas. Tengo dos mascotas, mis gatas Pelusa y Manchita, y mi perro León. A todos los quiero mucho, aunque a veces me molesten, así como yo molestaba a mis padres con sus quehaceres cuando era pequeña. Soy de pocos amigos y muchos conocidos, enemigos no cuento ya que creo que no los merezco. Pienso que pasé la mayor parte de mi infancia siendo una niña seria, ahora quiero ser distinta, mas en contadas ocasiones mi solemnidad llega a ser exagerada, por lo mismo tengo pocos amigos. A la gente no le interesa una persona tan aburrida en su círculo. Es por eso que agradezco tener a mis compañeros de vida.

Confieso que no he sido totalmente cordial y sincera con ellos, pero no entraré en detalle.

Entre mis actividades diarias está estudiar, ejercitar, cocinar, dormir, tocar bajo. No necesariamente en ese orden, tampoco todos los días. Soy muy irresponsable, ya que me prometo hacer cosas que realmente no realizo a la brevedad. Y es eso lo que creo que me jugará feo si llego a estudiar medicina.

No sé qué hacer con mi vida. No tengo ambiciones, no tengo ideas claras sobre lo que quiero. Me gusta vivir pero no he planeado mi vida; y cada vez que alguien me felicita por ser como soy (según ellos), me da vergüenza. ¡Qué ganas tengo de decirles que soy una irresponsable!

Ni siquiera sé si quiero estudiar medicina. El tema es, ¿qué debería estudiar entonces? Creo que si entro a estudiar lo que sea, podría desarrollarme bien, pero nada me interesa lo suficiente para hacerlo. A veces me siento al revés, me siento inútil, "me hundo".

Me drogo con azúcar y alcohol. Según yo, son las únicas adicciones que tengo.

Me gusta expresar lo alegre que puedo ser, y prefiero no mostrarme en mis momentos de debilidad. El problema es que mi fibra sensible choca con cualquier objeto y me duele. Duelen las cosas que imagino (me jacto de ser una persona sin creatividad, pero la verdad es que Hollywood podría sacar buenos guiones de mi mente). Duelen las cosas que no han pasado y puede que no pasen, de todos modos, duelen.

Lloro de vez en cuando, pero cuando lo hago, nunca es por lo que digo que es. Son todos mis sentimientos e ideas encontrados en un punto detonados por un factor externo. Odio que sea así, porque no soy honesta conmigo ni con el resto.

¿Dije que soy sensible? Sí. No me molesta. Prefiero sentir mucho a nada. Y temo perder mi sensibilidad (¿cómo podrías perderla, si eres humana y te pones a llorar por un toponcito?); he vivido situaciones que deberían ser traumáticas, por ejemplo, el accidente de mi hermano este verano, pero en ningún momento lloré por él, de algún modo sabía que estaba vivo y bien, más bien lloré porque esperaba que algunas personas en específico se enteraran y se preocuparan por mí (cosa que no sucedió).

La decepción es la más grande de mis penas, porque espero mucho de la gente, cuando en realidad debería ser lo contrario: las personas de las que me rodeo nunca cumplen mis expectativas, lo que me hace pensar "¿no me merecen, o es que de verdad pido mucho?". Nunca llego a un acuerdo.

Mi vida amorosa no existe, así que no puedo describirla. Solo existe lo que pudo haber sido alguna vez, y es que nunca he amado a alguien y ese alguien no me quiere.

La gente me ve por mi éxito académico, porque las otras secciones de mi vida son un desastre.

Nunca he estado en el "peso ideal", incluso de bebé estaba en sobrepeso. Desde los doce años tengo la concepción de que mi cuerpo no está bien. Comencé a hacer ejercicio, luego lo dejé por unos años. Es 2020 y volví a retomarlo porque si no lo hago ahora, tal vez nunca lo haga. Quiero sentirme bien con él, quiero amarlo.

Según mi madre soy linda, pero es porque soy su hija, y todo el mundo le dice eso a sus hijos (de todos modos, le creo, ella es bellísima). Según yo, no doy asco, pero tampoco soy linda. Hubo alguien en mi EM que me hizo bullying, destruyó mi autoestima un poco, y ahora trato de reconstruirla.

Me gusta escuchar música hasta aburrirme y necesite escuchar nuevos álbumes, nuevas bandas. Debo admitir que me he visto influenciada por personas que quiero íntimamente, y si algo llegara a cortar esas relaciones, difícilmente podré escuchar su música sin sentirme triste (nunca dediques canciones, disfrútalas).

Me atemoriza el fracaso.

He perdido muchas oportunidades por ser tímida e ingenua.

Sería genial poder vivir mucho, morir en mi cama mientras duermo. Mas solo he pensado en el final, no en el recorrido. Si estoy sola el resto de mi vida, ¿de qué me sirve vivirla? Mis amigos harán sus planes. Tendrán su vida aparte y no seré parte fundamental de ella. Mis padres morirán y estoy segura de que no volveré a cruzar caminos con mis hermanos, aunque me duela.

No sé a dónde voy. Estoy sola en esto, y debo armarme para enfrentar lo que viene.

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⏰ Última actualización: Aug 30, 2020 ⏰

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