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Cinco horas después, Bucky seguía en la misma posición, sentado en el asiento viendo a los pilotos haciendo su trabajo y Maria Hill hablar por su micrófono cada dos minutos, posiblemente con Fury o algún otro Vengador u oficial.

-Afirmativo – dice la mujer al micrófono en su oreja antes de mirar al hombre más que viejo – Sr.Barnes, el Capitán América ya se encuentra en la localización, ala norte, el Hombre Araña se encuentra en la ala derecha, estamos descendiendo.

La mujer no tiene que decirle que hacer, sabe que Bucky conoce perfectamente lo que debe de hacer. Solo destruir y si es necesario, matar. La mujer se levanta y le extiende dos armas tecnológicas, se recargan solas. Una es una pequeña arma semiautomática y otra un AK-12, o Bucky cree, las armas ya no son lo mismo que eran antes. No necesita más, su brazo de metal (vibranium realmente) hace el resto.

Bucky se levanta y guarda el arma semiautomática detrás de su pantalón, mientras que aguanta la otra con su mano de carne y hueso, al menos es un Soldado del Invierno mejorado. Hill lo saca de sus pensamientos cuando le extiende un pequeño micrófono que no duda en esconder en su oreja.

El Jet baja lo suficiente al suelo como para dejar caer la rampa, pero a Bucky le da igual y salta a un lado.

-El mismo Capitán se ha ofrecido a llevarlo de nuevo a Wakanda – habla Hills mirándole desde el Jet – buena suerte soldado.

Bucky asiente viendo el Jet levantarse por los aires, y entonces ve a su alrededor, una de las tantas localizaciones de la organización, todo el lugar parpadeaba en rojo en señal de ataque y Bucky se maldice por no prestarle atención a Maria y tirar el archivo en la primera oportunidad que Hill no estuviera mirando, a hora no sabe donde demonios esta, solo que es un lugar cálido, posiblemente latino.

-¿Bucky? – preguntan a través del micrófono, Bucky reconoce rápidamente que es Steve.

-¿Hermano? – pregunta el soldado – ¿Dónde estás?

-Ala sur, tercer piso, creo que te espera un equipo de cinco en la entrada- dice el Capitán entre jadeos debido a los movimientos que se imagina que debe de hacer por la pelea.

Bucky suspira, sintiendo la adrenalina corriendo, tiene que admitir que extrañaba eso.

Corre hasta el centro, abriendo la puerta de una patada. Y siendo recibido por efectivamente cinco hombres en la entrada, cinco que Bucky no tarda en disparar, siempre en sus piernas y brazos, lo que sea para dejarlos heridos sin posibilidad de atacar de nuevo, pero sin matarlo, es lo único que pide SHIELD (Steve realmente). Corre hasta subir las escaleras en forma de caracol, encontrándose con otro agente de Hydra.

Este trata de golpearlo, pero Bucky lo esquiva, en cambio cambia su arma al brazo de vibranium y toma la mano del hombre, sin problema rompe el brazo contra su rodilla antes de golpear la cara con su mano humana y desmayarlo golpeando su cuello con la parte trasera del arma.

Se acerca al barandal y mira hacia arriba, notando a dos manchas pelear, una roja y otra negra, apunta con su pistola a la mancha negra antes de disparar, y sin problemas cae el cuerpo hasta golpear el suelo frente a Bucky. Cuando cree que ya puede seguir, ve a la mancha roja ser empujada, tropezar contra el barandal y caer.

Este niño es único.

Toma su arma ahora con la mano humana enguantada en negro y corre hasta subir un tercer piso, cuando cree que es suficiente, extiende su mano de metal y toma la mancha roja en el vuelo, evitando que se golpee contra el suelo y se vuelva puré.

-¡Hola tío Bucky! – dice con entusiasmo la mancha roja. O sea, el Hombre Araña.

Peter Rogers Stark.