>1<

1.2K 141 42
                                    

Luzu dirigió una última mirada al pueblo, aún no bajaba la colina de su casa y sus ojos amenazaban con llorar. Tenía que hacer una misión muy importante para salvar Karamland y probablemente nunca volvería.

Sentía tristeza, ya que no había nadie en el pueblo por lo que no tuvo una despedida, sólo pudo dejarle una carta a Vegetta. Suspiro pesadamente y se dispuso a bajar las escaleras, con Manolo siguiendolo con la correa puesta.

-Así que este es Luzu...- Luzu se sorprendió al ver a un chico de piel pálida, ojos marrones, cabello negro, un poco más alto que él y vestido de traje al lado de Merlon en los pies de la escalera.

-Luzu, este es Reborn, te acompañara en el viaje, es un gran guerrero y su ayuda te vendrá bien.- La noticia sorprendió al castaño, no se imaginaban que tendría un compañero y menos alguien que ni conocía. - Yo me retiro que tengo cosas que hacer.- Dijo el anciano para luego irse, dejando a los dos jóvenes solos.

-¿Así que eres Luzu no? No tienes pinta de ser muy gilipollas, eso está bien.- Por su tono de voz era imposible descifrar si estaba bromeando o lo decía enserio.

-Gracias... supongo.- Al no saber que responder solo dijo eso, para empezar a andar. Tenía un mapa y una brújula para orientarse y llegar al sitio, aunque por el momento no le haría falta.

El ambiente era algo incómodo, eran personas que no se conocían de nada y ahora tenían que convivir para llegar a un sitio a tomar por culo de donde estaban, más les valia llevarse bien.

-Y dime... ¿de dónde vienes?- Preguntó el castaño para romper el hielo.

-De un pueblo de al lado.- Respondío sin más rodeos, claro y conciso.

-¿Te han obligado a acompañarme o por qué estás aquí?- El castaño veía a Merlon capaz de obligar a alguien a acompañarle en contra de su voluntad.

-Un poco de los dos. Cuando me dijeron la idea me negué pero al ver que podía afectar a mi hogar también, yo mismo quise venir.- En ningún momento de la charla se giró para ver a Luzu, sólo seguía caminando sin más.

Luzu por su parte sacó un momento el mapa e intento quedarse con el camino que tendrían que seguir. Una vez memorizado una pequeña parte siguió andando. Ya estaban en las afueras del pueblo.

-Ahora háblame de ti, ¿por qué aceptaste está misión si hace unos meses decías ser Evil y no sé qué cosas por perder la alcaldía?-

"Si que vuelan las noticias de un lugar a otro." Fue lo que pensó Luzu al escuchar aquello, pero en verdad eso le hizo pensar un poco. Porque hace unos meses solo quería venganza y ahora se sacrificaba por el pueblo.

-Supongo que aunque lo que paso me dolió nunca he dejado de querer a Karmaland y mucho menos a sus habitantes. Me dolió lo que hicieron pero en el fondo los quiero y se que ellos a mi también. No me perdonaría nunca si al pueblo le pasa algo malo, y si para evitar eso me tengo que sacrificar lo hago.- Respondío al final de manera sincera. Y es que si, tenía un gran amor por el pueblo y por sus amigos, eso nada lo cambiaría.

-Entiendo.- Respondío sin más Reborn, era un hombre de pocas palabras.

Luzu suspiro ante la idea de que para hacer hablar a su compañero necesitaría un milagro, pero siguió andando. Aún era el primer día, ya tendrían tiempo de conocerse un poco más.

××××××××××××××××××××××××××××

Un Luzuborn al fin. Estoy muy feliz con esta historia ya que me gusta el shipp y era hora de hacer algo sobre ellos.

Travel (Luzuborn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora