Bocadillos y calentamiento -6

589 15 5
                                    

(¿Estás seguro de esto?) Se pregunto a si mismo, no hay ninguna duda (Por supuesto) Contesto su pregunta, determinado escondió la bolsa que llevaba y decidió tocar la puerta.

–Greeeto

Siguió tocando, esperando por una respuesta, pero había un silencio bastante extraño, extraño refiriéndose a su hermano. Abrió con lentitud la puerta, alzando su mano con firmeza en caso de que necesitara atacar. Examinando la sala, se percató de que todo estaba normal, nada fuera de su lugar, solamente ese silencio inquietante.

–¿Estás en casa? Quería saber si aceptabas acompañarme a un evento

Nadie respondió, era el momento perfecto. Grago se adentró en la casa de su hermano, fue difícil aligerar sus pasos teniendo en cuenta su tamaño, pero, logró llegar hasta la cocina danzando como un pétalo de jacaranda, y ahí, retomó el plan que había dejado a la mitad propagando las pequeñas bolas sobre la leche y el agua, y sí todo salía bien, hoy mismo aceleraría el proceso.

–Sin dolor no hay gloria hermano, o bueno, sin panza no hay paraíso

Esto no estaría pasando si Greto lo hubiera escuchado, pero no hay opción, tiene que forzar una nueva experiencia.

*Tan tan tan tan tan*

Unos golpecitos le llamarón la atención, efectuando la misma agilidad que utilizo antes, siguió el aquel sonido, demorando poco en darse cuenta de que provenían del pasillo que conecta la habitación de Greto con el comedor. Lo que vio, le sorprendió un poco: Su hermano de pie, con el teléfono en la oreja, una mirada enfocada en el vacío y una expresión apagada, ¿o más bien preocupada?

–¿Astillo?

Grago rompió el trance de Greto, que de inmediato colgó el teléfono y trato de adoptar una postura normal.

–¡EH¡ Oh, hola Grago, no te escuche entrar

El delgado se cruzó de brazos, parecía nervioso ahora.

–Toque varias veces, y escuche tanto silencio que quise asegurarme de que estuvieras bien

–Ya veo, me encuentro bien, todo esta bien, no hay nada que me apague hoy

–Pues estas bastante apagado ahora ¿Te encuentras bien hermanito?

–Yo... solo estoy estresado por cosas de la escuela, no tienes que darle importancia

Realmente, no era una actitud normal de Greto, pero él sabe que no lograra nada presionándolo, de hecho, (Seguro que el evento puede que sea lo que necesite para despejarse de aquello que lo atormenta) es lo que pensó.

–Si dices que estas bien, confiare en ti –posó una mano sobre el hombro de su hermano y le dedico una sonrisa cálida

–Gracias, aprecio la confianza que depositas en mí. En fin ¿qué haces aquí? ¿quién te invito? Jajaja

–Eso es algo muy osado para un tipo que siempre entra a mi casa llorando

–Pff, eso nunca sucedió, solo quieres hacerme mal

–Claaaro que sí je, ahora en serio, de la misma manera que años pasados, recibí una invitación para la prueba de escuderos y quería proponerte que nos acompañaras a mi esposa y a mi

–"No son muy aburridas" eso decías ¿qué paso con ese gruñón?

–Te he notado muy preocupado, pensé que querías pasar tiempo con tu hermanote y tu cuñada

–Pues para tu sorpresa, ya tenía planeado ir

–Eso sí que me sorprende ¿alguna chica te invito?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 26, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La solución de GragoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora