- RIN, RIN, RIN - sonó mi alarma
- Isabella despiértate - gritó mi mamá desde el otro lado de la puerta
- Ya estor despierta mamá- dije alzando la voz
- muévete que llegas tarde- Escuché y después se fue.
Otra vez madrugar para ir al instituto, me adentre al baño, realice mis necesidades y salí me puse un jean negro, camisa blanca y tenis blancos y lo que nunca falta mis lentes.
Bajo a la cocina donde me encuentro a mi mamá con mi hermano menor Lucas ya que Matthew vive con papá.
- Estoy lista mamá - dije captando su atención
- Hola Isa - dijo cariñosamente Lucas
- Hola luck - dije alborotando le el cabello.- Ey!! Yo ya estoy grande para eso - dijo con cara de enojado pero con su carita no se notaba casi.
- Jajajaja si claro ¿Cuantos años tienes luck? - pregunté
- Tengo 7 años Isabella - Dijo orgulloso mostrándome el número con sus manitas para después preguntarme
-¿Cuantos tienes tú?- pregunto
- yo fortachón tengo 16 - dije riéndome.- Ya basta los dos y desayunen que se les va a hacer tarde- dijo mamá interrumpiendo la conversación
- Si mamá - dijimos los dos al unísono
Destinamos rápido y salimos de la casa ahoy mamá llevará a Luck a la primaria y yo voy casi corriendo pues eran más de 7 cuadras y ya era tarde, cuando visualice el gran edificio sonaba el timbre y salí corriendo pero me vi interrumpida por una espalda pues no me había fijado de que alguien estaba ahí.
Caí al suelo pero me levanté
- perdón no te vi- dije con la cabeza baja pues estaba acomodando las carpetas y empecé a caminar tal era la distracción que no me fijé con quien había chocado
- ¡Oye nerd! Se te quedó esto- dijo una voz grave que reconocí al instante.
-¿Que? - dije secamente para que no empezará a molestar
- Tu dignidad- dijo riendo y yo rodeó los ojos y me volteo para seguir mi camino pero antes de irme le dije
- capullo- murmuré y salí para llegar a la primer clase.
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Eres mía, No lo dudes
Teen Fiction- ¿Que quieres?- le pregunté ya tenía buen rato siguiéndome - ¿Quieres saber que quiero?- él me respondió con otra pregunta y está colmando mi paciente -si - dije casi obvia - Te quiero a ti, Isabella Hale Me sorprendió lo que dijo nunca me habían...