Los celos me pueden

1K 72 0
                                    

Después de una.. Dos... Tres... Cuatro... Largas horas al fin terminaron de firmar, y media hora después volvieron al hotel. Yo estaba mirando el móvil.

D: ¡Princesa! Ya volvimos. Uf me duele la mano.

Je: A mi también, pero ha estado guay.

J: Sí guay... Con tantas niñas estais genial ¿no?...

D: Pues claro son nuestras gemel... Un momento. Espera, ¡Tú estás celosa!

J: ¿¡Qué!? Ni loca, más quisieras tu.

D: Vamos admítelo, estás celosa.

J: Que no Dani joder.

-me empezaba a sonrojar-

D: Ay mira Jesús sus mejillitas se ponen rojas está celosa.

Je: Jajaja, es verdad, te estás poniendo roja.

¡Ahhhh! Grité tapándome la cara con una almoada.

Jesús se fue al cuarto de baño.

D: Yo también estaría celoso incluso más que tú. -me susurró al oído muy bajo-

Le sonreí. Jesús salió del baño.

Je: Mañana conciertazo... Estoy súper nervioso.

D: Ya ves... Málaga allá vamos.

J: Como mola... Málaga. Además como es por la noche la tarde es libre ¿no?

D: Sí, bueno, sin contar que si queremos salir al centro comercial un montón de policías detrás... Libres.

Je: A mi me da igual que las niñas me coman vivo a besos. -Pone cara pillo-

D: No no si ya...

J: Jajajaj te como jajajaja.

D: Y yo a ti. (Me sonríe)

Je: Yo os dejo un rato solos...

Salió de la habitación y se fue a no sé donde.

Dani me empezaba a mirar fijamente, cosa que no entendía para nada.
J: Dani ¿te ocurre algo?
D: Sí Janett. Me ocurre algo.

Ser padre te hizo madurarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora