Un Nuevo Comienzo para la Villana

Capítulo 4

Luego de dar por completada la transacción, Krauss se quitó su manto y cubrió a Elena con el mismo, alzandola en brazos antes de abandonar el sitio a grandes prisas.

Una vez a cierta distancia, Bert finalmente ya no pudo contener sus dudas.

"Krauss, ese dinero era de tu pertenencia, por lo que no opinaré en lo que lo hayas gastado... Pero la esclavitud es absolutamente ilegal en nuestro país, si esto llegase a oídos de Su Majestad estarás en graves problemas."
"Es una preocupación sin importancia."
"¡No, no, no! ¡Hablamos de Su Majestad aquí!"
"Insecto insignificante."
"¡¿Puedes dejar de medir a todos con esa escala?! ¡Por supuesto que Su Majestad es más débil que un monstruo como tú! ¡Te estoy diciendo que podrías convertirte en un enemigo del país!"
"Si ese día llegase... Colocaré a Artemisa como Reina."
"Por favor... por el bien de mi pobre corazón, dime que fue una broma."

La plegaria de Bert fue únicamente respondida por la sería mirada de Krauss.

"¿Por qué alguien como tú tiene que ser el próximo Duque?"
"Opino lo mismo."
"¡¿Opinas lo mismo?! ¡No, no, no! Por poco y me haces olvidar el punto principal... ¡Estaba preguntándote como le explicarás a Su Majestad que has comprado una esclava!"
"Le diré exactamente lo que ocurrió."
"¡Te estoy diciendo que eso precisamente es lo que está mal! ¡¿Le dirás 'Hola Su Majestad ¿Puede creerlo? Me compré una esclava ¿Qué piensa?'"
"No necesito la opinión de un insecto."
"¡¿Otra vez?! Por los Dioses ¿Cómo educan a los niños en la familia del Duque? Está bien, aceptaré la idea que no le darás una pizca de importancia a la opinión de Su Majestad... Entonces ¿Quien es esa chica como para que gastes tu recompensa en ella de esa forma?"
"Elena."
"¿Una conocida? Supongo que darías lo que fuese por salvarla entonces."
"No la conozco realmente."
"¡¿No la conoces?! ¡¿Eh?! ¡¿Eh?! ¡¿Qué se supone que significa eso?!"
"Primera candidata Elena."
"¿Primera candidata...? ¡Espera! ¡¿Esa Elena?! ¡¿Acaso has matado tantos dragones que finalmente has enloquecido?! ¡Regresala donde la has encontrado!"
"No es una mascota abandonada."
"Estoy muerto... Cuando regrese me espera una cita con el verdugo..."
"¿Nuevo interés amoroso?"
"¡Me refiero a que si Su Majestad no lo hace, Su Excelencia el Duque hará rodar mi cabeza con su espada!"
"Fue un placer conocerte."
"¡¿Inesperadamente desalmado?!"

Krauss Lord, conocido como 'señor de la guerra', 'terror del campo de batalla', 'demonio de acero y sangre', 'verdugo de dragones', 'héroe del Principado', 'Duque demoníaco'. Al escuchar el ir y venir de la conversación del par de hombres, Elena pudo reconocer la identidad de su nuevo amo como tal persona. Aun así, Elena permaneció en silencio, ya que nada podría hacer en esta situación.

Por unos interminables 30 minutos, el grupo continuó avanzando hasta llegar a un carruaje.

"No tienes intención de esperar a Su Majestad ¿Verdad?"
"Hazlo tu si quieres."
"¿Entonces ya regresaras?"
"..."
"Tranquilo, no tengo intención de detenerte, sólo déjame dinero para comprar un caballo."

Sin decir nada, Krauss dejó a Elena y tomó una bolsa de monedas del interior de su chaqueta.

"Krauss ¿Recuerdas que estamos en Elatos? Dije que quería comprar un caballo, no una cuadrilla completa."
"Soborno."
"Ah, ya veo, me pagas por mi silencio... ¡Hey! ¡Eso fue demasiado directo! ¡¿No tenías una mejor forma de decirlo?!"
"Silencio... ¿O voy a silenciarte?"
"¡¿Ahora me amenazas?! Escucha Krauss, es por cosas como estas que no tienes amigos ¿No podrías sólo pedirme por favor que no mencione nada?"
"¿Podrías cerrar la boca por favor?"
"Umu, es una mejora, si no liberaras tanto instinto asesino sería mucho mejor. De todos modos, cuando ambos carruajes se encuentren, recuerda decirle a Su Majestad que estarás encargándote de la seguridad del camino de regreso."

No esperando a la respuesta de Krauss, Bert se dio la media vuelta en camino a la posada que habían reservado con anterioridad.

Sin quitarse el manto cubriendo su cuerpo, Elena siguió a Krauss quien la instó a subir a un lujoso carruaje.

"Regresamos."
"Entendido Milord."

Por un momento Elena consideró si sentarse o no en unos asientos con revestimiento tan lujoso como los de los muebles del Palacio, hasta finalmente ceder a la tentación, reposando su cuerpo sobre los mismos, comenzando a ser consumida por el cansancio de los días anteriores y luchando para mantenerse despierta... Sólo para ser obligada a ponerse de pie por Krauss.

'Soy una esclava ahora, supongo que el piso es suficiente para mí...' no pudo evitar pensar ella, sólo para que sus expectativas fuesen traicionadas de la manera más increíble posible.

"Este es tu lugar."

Como si de la creación más frágil de la existencia se tratase, Krauss tomó a Elena y la colocó sobre sus piernas, antes de hacerla reposar su cuerpo contra su pecho.

'¡Ahora realmente no lograré descansar en lo absoluto!'

Siendo devorada por vergüenza de tal primer contacto cercano con alguien del sexo opuesto, comenzó la nueva vida de Elena en camino a un país diferente.