Five Hargreeves

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Outfit

Una joven pelinegra, caminaba hasta su trabajo, trabajaba con su abuela y está vez, cubriría su turno de la noche, pues ella iría a un club con sus amigas

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Una joven pelinegra, caminaba hasta su trabajo, trabajaba con su abuela y está vez, cubriría su turno de la noche, pues ella iría a un club con sus amigas.

Llegó a la cafetería y para su sorpresa, no había ninguna persona. Amarró su cabello en una coleta baja, para comenzar a trabajar.

Termino de limpiar un par de mesas que se habían quedado sucias. Cuando escucho el timbre, allí se encontraba un señor, ya grande. Limpió un poco la barra y tomo la libreta, con un bolígrafo. Se acercó a el señor, antes de que pudiera decir algo, un "joven" chico entro por la puerta, tomando asiento a lado del señor.
Tomo la orden de los dos [aunque no fuera necesario] e intento servirla lo más rápido posible, para terminar de limpiar las mesas.
Luego de servir el café del chico, el señor pago por los dos, mientras que el joven le hacía una pequeña platica y la chica limpiaba el piso. Cuando el señor salió de aquel lugar, la pelinegra se incómodo un poco, por estar a solas con aquel chico de mirada penetrante, aún así, siguió con lo suyo.

Five: ¿Sigues enojada, nena?

El azabache se teletranporto a su lado, para tomar su mano y teletransportarse a la barra, donde la acomodo arriba de sus piernas. La pelinegra se aguanto aquel vomito que veía venir.

___: te dije mil veces, que no me gusta que hagas eso

Five: ¿Ya te dije que te ves preciosa con esa ropa?

___: sigo enojada contigo, Hargreeves

Five: ya te dije que Vanya, no siente nada por mi

___: ¿Entonces por qué se miran así?

Five: ¡Somos hermanos!

___: Five, se que en el pasado tuvieron algo, además, la miras como a mi

Five: eso es imposible ____, a ti te miro....

La frase de aquel chico, se vió interrumpida, por la voz de un señor, acompañado de varios hombres, vestidos completamente de negro y apuntando con armas al chico.
Luego de una "discusión" con el chico, la pelinegra ya sabía que iba a pasar, busco el lugar perfecto para esconderse y salir corriendo, no sin antes dejar un discreto beso, en la mandíbula de aquel chico, quién le sonrió levemente.

Five: — suspiro — yo no me preocuparía por eso.... No vas a ir a casa

Y antes de que respondiera, se teletranporto con un cuchillo, para clavarlo en su nuca. La pelinegra salió corriendo detrás de la barra, mientras que su novio, mataba a los señores. Sintió que alguien la seguía y si, era uno de los hombres, que le apuntaba y le disparo, afortunadamente, la pelinegra rodó por el suelo, para evitar el disparo, aunque quedó aturdida, ya que había rozado su brazo.

Eres hombre muerto.....

Eso pensó Five, cuando se dio cuenta de aquello, su sangre hirvió, nadie iba a tocar a su novia, a su tesoro y el que se atrevía a hacerlo, terminaba más que muerto. Dejo a los dos hombres que se mataron entre sí y les quitó un arma, con el mismo cuchillo, cortó la garganta de que se atrevió a dispararle a su novia, para luego, matarlo con cinco disparos en el vientre.

Terminó con todos, para luego acercarse a su querida chica, quién salía detrás de la barra, para lanzarse a los brazos de su novio y sollozar en su hombro. Este acarició su cintura y le robo un beso.
Se separó poco a poco y volvió a sentar en sus piernas, tomo un cuchillo mucho más filoso y le rogó a su novia, porque le hiciera una grande cortada en el brazo.
Esta se horrorizo al ver tanta sangre, además de ver cómo su novio sacaba un pequeño rastreador de su brazo, tomo un trapo que estaba en la cocina y lo amarró a su brazo, para parar la sangre, mientras que el la observaba detenidamente, no podía creer que la chica más popular, "fresa" [o así la describían chicos a los que ella rechazaba], linda, amable y dulce, estuviera con el, quién se describía con un asesinó sin piedad, frío y sin afectó.
Ella lo adoraba con todo su corazón, era la segunda persona más importante en su vida y no se imaginaba crecer sin el a su lado. Mientras que el, intentaba cambiar día a día su actitud o forma de ser, pues varios decían, que si seguía siendo frío con ella, la pelinegra lo dejaría, por una de los chicos de su escuela y a decir verdad, eso lo aterraba, por completo.

Mientras ella acomodaba su corbata con un pequeño sonrojó el le robo un beso, el cual iba a intensificar, si no hubiera sido interrumpido, por un pellizco de su novia, quién le indicaba que se tenía que ir.
Salieron por aquella puerta, tomados de la mano, para que después aquel rastreador fuera tirado junto a una alcantarilla y así, se  subieron a aquel carro.

___: cuando te dije que tuviéramos una relación tranquila, no se si me había explicado

Five: baby girl, esto es lo más tranquilo que verás de ahora en adelante

___: no prefieres ir al bosque de siempre en vez de ir a casa de tu hermana, Vanya — rodó los ojos —

Five: aunque tú idea es mucho mejor y aunque me cueste rechazarla, tenemos que ir

___: pufff,  ¿Tu rechazando una noche de placer? ¿Quién eres y que me hiciste a mi chico?

Five: esa noche de placer no la estoy rechazando, la estoy corriendo para la madrugada, crees que yo, Five Hargreeves, rechazaría una noche contigo

___: lo estás haciendo, cariño

Five: no me harás cambiar de opinión, ____

___: ¿ni unos minutos, bebé?

Five: sabes que los minutos, nunca terminan en minutos, si no en horas

___: ¿Que más da? Además, por si no te has dado cuenta te estás desviando al bosque

Five: mierda — susurró — tu ganas cariño...

Parece que tuvieron unas horas muy placenteras, luego de aquella pelea tan agotadora

»One Shots«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora