ROOMMATE [BaekYeol/KaiSoo] EXO

Think... or feel?

No esperaba que Baekhyun aceptara mi propuesta tan rápido, mucho menos que fuera esa misma noche, ni que durmiéramos juntos, pero todo terminó de esa manera; a la mañana siguiente lo vi a mi lado, aun dormía, y al verlo así recordaba la noche anterior. Nunca habíamos dormido juntos... con ropa, sin hacer nada más que dormir abrazados, Baekhyun se había quedado dormido primero que yo, con sus (ya normales para mi) ruidos extraños antes de dormir, no se movió para nada en toda la noche, estaba demasiado calmado, tanto que en una ocasión revisé si estaba respirando, no solía quedarse tan quieto.

Probablemente se había desahogado al contarme su horrible experiencia y por eso pudo dormir más tranquilo.

Aún me preguntaba cómo una persona pudo hacer lo que ese tipo le hizo, aunque si era desconcertante lo de su madre, pero no era culpa de Baekhyun. Así que yo quería hacer que él superara todo lo que le pasó, que en vez de recordar ese suceso, de ahora en adelante solo pensara en nosotros, que confiara más en mí, porque yo nunca le haría daño, porque yo lo quería.

Tenía en mente un montón de cosas que podríamos hacer juntos, era una ventaja enorme el hecho de que nos gustaran, en cierta forma, cosas parecidas. Por ahora, podía llevarle el desayuno a la cama, aunque no sería la primera vez que lo hiciera.

-¡Hey! Despierta Baek, te traje el desayuno- le dije luego de dejar la bandeja sobre la mesita al lado de la cama, sentándome a su lado y moviéndolo un poco.

-Mmm- parecía haber dormido muy bien, no quería abrir los ojos y se veía adorable, por lo que me reí- ¿De qué te ríes?- se sentó estirando sus brazos, con los ojos medio abiertos, se veía adorablemente gracioso-Ya Chanyeol, ¡dime!- negué con la cabeza y puse la bandeja sobre sus piernas.

-Te traje el desayuno- sonrió.

-Gracias- hay cosas que nunca cambian, le seguía gustando mucho que lo sirviera como si fuera una reina. Lo observé comiendo felizmente y me ofreció una de sus tostadas, yo ya había desayunado y ya estaba listo para ir a la universidad, pero acepté y me quedé con él hasta que terminó su comida.

-¿Quieres ir conmigo a la universidad?- él se quedó pensando por un momento.

-Pero nos iremos caminando ¿verdad?-

-Siempre me he preguntado ¿Por qué no te gusta montar en bicicleta?- eso me tenía intrigado desde hace mucho.

-Yo... ahh, es algo estúpido- le revolqué el cabello.

-No me reiré, lo prometo, ya me has contado otras cosas peores...- se quedó mirándome mientras se mordía el labio, pensando si debía decírmelo o no.

-Aun no sé porque me traumé por algo tan tonto, seguro te reirás como los idiotas de Tao y Luhan-

-Ya te dije que no me voy a reír de ti, cuéntame- me miró aun dudando, pero al final se decidió.

-Cuando era pequeño estaba jugando con mis amigos y me retaron a pasar con la bicicleta sobre un largo trozo de madera que estaba sobre un hueco, iba a toda velocidad desde una colina y bueno... cuando llegué al sitio y pasé por encima, la madera se rompió y caí hasta el fondo, la maldita bicicleta cayó sobre mí, aplastándome, me fracturé un brazo, la pierna, dos costillas y estaba lleno de rasguños y lodo. Quedé como un idiota frente a todos y lloré como nunca antes lo había hecho, casi 4 meses pasaron antes de que me recuperara. En fin, sé que es tonto, pero ya sabes que soy muy sensible, no supero las cosas fácilmente y...-

-No te juzgaré Baek, todos tenemos nuestros traumas de la infancia, aunque mis problemas no eran como los tuyos. Nunca me lastimé gravemente o algo así, pero cuando era pequeño me molestaban por mis orejas, tenía anteojos y era un poco... raro, siempre me hacían bromas por eso- lo vi sonreír mientras me miraba y acariciaba una de mis orejas.