Trato

[Advertencia: lenguaje vulgar(?)]

Las largas tardes en el comité estudiantil eran como su pan de cada día. Pasar tiempo juntos, también. No por eso lo sufría menos.

Minamoto Teru no era una persona que demostrara lo que pensaba, era reservado a su manera, y Aoi Akane lo sabía. Por otro lado, había momentos en qué si era expresivo. Como eso.

―Minamoto-senpai, ¿podrías quedarte quieto por cinco minutos? ―dijo Akane, exasperado.

―Estoy quieto ―murmuró en respuesta, congelando sus piernas que hacía dos segundos estaban temblando de ansiedad.

Cumplió su palabra por exactamente diez segundos, antes de volver a removerse incómodo. Akane se sacó los lentes y se pasó una mano por el rostro.

―¿Qué te pasa?

―¿A qué te refieres? ―sonrió, haciéndose el distraído.

―No estás haciendo tu trabajo, y como no te quedas quieto, no me dejas concentrarme para hacer el mío.

―¿Oh? ―sonrió apenas―, ¿estás preocupado por mí?

―¿Siquiera escuchas lo que digo?

Teru guardó silencio y fingió concentrarse, por lo que Akane hizo lo mismo. Trabajaron un rato, hasta que Teru cerró el cuaderno que estaba utilizando.

―Hagamos una apuesta, Aoi-kun.

―No.

―¿Quieres jugar a las cartas?

―No.

―Los próximos exámenes-

―¿Qué te cuesta pedir las cosas como una persona normal? ―interrumpió, irritado.

―¿Disculpa? ―cuestionó sonriendo, como si no supiera a qué se refería.

―Quieres que te haga un favor, ¿verdad? Solo dilo.

Teru se rascó la nuca y suspiró.

―Aoi-kun, ¿puedo pedirte un favor?

―No.

Akane rio, sorprendido de que haya caído en eso. Teru lo miró frunciendo el ceño, molesto.

―¿Y si te dijera que voy a invitar a Ao-chan a salir? ―sonrió, confiado, pero Akane le devolvió la sonrisa.

―Primero, una amenaza tan usada y jamás cumplida, pierde el efecto de amenaza. Segundo, si eso hace fe-feliz a Ao-chan, entonces yo soy feliz.

Akane reanudó su trabajo, pero Teru no le quitaba los ojos de encima. Frunció la boca, cambió de lugar las piernas, se rascó la nuca otra vez y terminó suspirando, derrotado esta vez.

―Está bien, de verdad necesito un favor, ¿sí? Te lo devolveré con, uh, diez favores.

―Veinte.

―Quince ―frunció el ceño―, ¿tenemos un trato?

―Todavía no, no me meteré sin saber qué es el favor antes.

―Pues... ―Teru dudó un momento, cosa que hizo que la curiosidad de Akane picara―, bien, está bien. Mi hermano está saliendo con un chico, ¿sí?

Hizo una pausa y Akane notó que estaba evaluando su reacción.

―Ajá, ¿y?

―Entonces, estamos cenando, ¿sí? Mis padres, mis hermanos y yo. Estamos en silencio, y de la nada Kou dice "estoy saliendo con alguien". Mis padres se alegran y mi mamá pregunta cómo se llama ella. Entonces, Kou dice en voz baja "... Sousuke".