━My baby don't like it.

t w e n t y - o n e

—Me refería a que podríamos caminar fuera por la noche—Jeno apoya su rostro sobre una de sus manos mientras lo mira desde el suelo, al parecer a su compañero de cuarto le gusta mucho sentarse ahí.

Donghyuck suspira tirado sobre su cama con la mirada en el techo,realmente no tenía muchas ganas aunque la idea de salir con Jeno resultaba algo reconfortante.

—Donghyuck,estoy comenzado a hartarme de verte ahí,quieto y deprimido como un hongo todo el día.

Pero hoy era su día de descanso...

—Mis amigos suelen decir que no soy divertido pero podemos hacer lo que te guste a ti-

Oh vamos,no podía decirle eso esperando que no le afecte—Está bien—interrumpe y como si su energía se hubiese cargado de un momento a otro,Donghyuck se levanta de su cama rápidamente para arreglarse un poco.

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Mala idea.

Donghyuck había lastimado su pierna cuando Jeno decidió que era buena idea llevarlo hacia un tumulto de gente extasiada disfrutando de un recital,ocurriendo así un conjunto de tragedias que acabaron por dejarlo muy adolorido.

Desde pisadas y empujones hasta un vendedor de dulces muy despistado con un carrito en su poder.

Aunque como forma de disculpas, el pelinegro se ofreció a llevarlo en su espalda de camino a casa.
—Está bien,no creo que seas tan pesado—el castaño titubeó un poco antes de subir a la espalda de Jeno hasta que finalmente lo hace—Olvida lo que dije,sólo intentaba ser amable.

Donghyuck da un golpe a la espalda de Jeno, avergonzado y este solo ríe por el hecho de que a Donghyuck le afecte un chiste tan común cuando en realidad el castaño está un buena forma. Saludable y adorable...diría él.

No hay muchas personas en la calle ahora, tardaron mucho intentando aliviar el dolor de su pierna y ya eran pasadas las doce. Piensa en la hora intentando desviar la atención del conflicto interno que está teniendo, sus brazos titubean en rodear el cuello de Jeno por alguna razón.

—Sólo hazlo,¿No quieres lastimarte de nuevo,cierto?—su tono burlón fue suficiente para saber que estaba pensando demasiado.

Suspiró fuertemente antes de hacerlo y Jeno emprendió camino al apartamento,que afortunadamente no quedaba muy lejos.

Una vez que se tornó aburrido observar los edificios a su alrededor, Donghyuck se encontró a sí mismo admirando en detalle el cabello de Jeno y alargando más de lo normal la descripción de unos simples mechones de cabello oscuro.

Se movían con ligereza debido a la suave brisa que anunciaban el final del verano,se veía suave y brillante con las extensiones de bombillos que decoraban las cercanías del festival reflejándose en el.

No sabe con exactitud que hizo que  demostrara tal acto de gratitud,reprimió una risa tonta y una pequeña calidez lo invadió,sus dedos se dirigieron al lugar para dejar unas leves caricias y escuchó a Jeno reír bajo,cuando notó lo que estaba haciendo quizo disimular sus acciones comenzando a jalar alguno de ellos.

—Me gustaban más las caricias.

—Cállate—el calor sube hasta las orejas del castaño y su respuesta suena bajita.

El mentón de Donghyuck se apoya sobre el hombro de Jeno y sus brazos se aligeran,nota que faltan dos cuadras para llegar a la casa pero justo ahora podría olvidarse por algunos minutos de todos sus problemas.

Y de manera inconsiente lo hace,cierra los ojos cuando siente una plena seguridad,simplemente estaba disfrutando de la compañia del otro,no hacía falta decirlo en voz alta.

Lo que no sabía era que Jeno lo estaba observando y cuando se percató, pudo observar su perfecto perfil. Si alguno de sus amigos pudiera verlo en ese instante,dirían que su mirada destellaba al igual que cuando miraba a Mark años antes.

Aquella sensación agradable volvió... pero ahora era diferente.

El cabello castaño se removía sobre su frente también y se preguntó a sí mismo si debería cambiar de aspecto tal vez,evadiendo completamente el pensamiento anterior.

—Fue interesante hoy.—Dice sin saber con exactitud cuál es la palabra adecuada para describir su anterior experiencia.

—Lo siento por eso—contesta—Me divertí contigo también.

Y en un intento de cubrir su repentina y extraña emoción por aquellas palabras,el castaño cubre a Jeno con el gorro de su hoodie como acto involuntario recibiendo una queja con respecto a bloquear su vista.

La risa de Jeno llena las calles con baja circulación a estas horas.

Desearía verla por un tiempo más...

Mark se distrae por algunos minutos observando el brazalete de Donghyuck que encontró olvidado en el piso de su antigüa habitación y que se mantuvo guardado en su bolsillo desde entonces,tanto que se percata tarde del humo que desprende la sartén a su lado.

—Donghyuck hacía un excelente tteokbokki ¿No lo crees Jungwoo?—el nombrado asiente inocentemente sin notar las verdaderas intenciones de Taeil.

—A Donghyuck no se le quemaban los-

Taeil ríe mientras un Mark frustrado suelta la sartén y deja la cucharada de madera que estaba utilizando sobre la mesada,abandonando el lugar con una expresión irritada.

—Uh,creo que se enojó...—Jungwoo se encoge de hombros mientras sigue cortando las verduras que seguramente Taeyong utilizará para preparar una nueva cena.

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Mark tanteaba sus manos sobre las sábanas una y otra vez,si bien se había dicho a sí mismo no pensar mucho sobre ese tema,no podía evitarlo.

Rueda sobre su cama por quinta vez en la noche y otra vez su mirada se ve perdida en el lugar vacío a su lado y su imaginacion le juega una mala pasada nuevamente, frustrándolo y atormentandolo por sus propias palabras.

3 semanas.

Tres semanas sin saber de aquella persona que intentaba mantener lejos de su memoria,tres semanas sin saber de Donghyuck.

Es irónico que ahora le importe, pero su mente simplemente comienza a divagar de un momento a otro y lo odia.

Haneul

Hola mark.
Espero que no estés descansando aún.
¿Podemos vernos mañana?

El mensaje llama su atención pero Mark no contesta de inmediato,su cabeza no se concentraría lo suficiente como para formular una respuesta.

Mark toca repetidas veces la puerta de la habitación del mayor.
—Taeil-hyung,necesito pedirte un favor.

—¡No hay nadie!—contesta Jungwoo desde dentro y puede escuchar a su compañero decirle que haga silencio.

—Pasa Mark—el mayor de todos abre la puerta con una mueca no muy amigable en su rostro puesto a que ya es madrugada.

La luz encendida hace que Jungwoo se queje y mire a Mark con mala cara, utilizando su escasa energía para intentar escuchar con qué tontería se viene el canadiense ahora.

—¿Sabes donde está Donghyuck? Necesito verlo—Mark intenta hablar bajo—O al menos saber donde está...

Quería convercerse a sí mismo de que su desición había sido la correcta.