Nervios!!

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Él me tomó de la mano y caminamos hacia el comedor, nos sentamos y tomamos el menú.

Estaba muy nerviosa, tenerlo hay conmigo sin saber más que su nombre.

__Está muy interesante el menú.- dijo pasandome uno de ellos.

__Que vas a pedir?.- preguntó aun mirando el menú.

__Que tal si hacemos algo, Digamos lo que queremos al mismo tiempo, que te parece?

__Me parece divertido, vamos.. 1,2,3!!

__ Pollo frito!!.- Gritamos los dos al mismo tiempo provocando que muchas personas volteen a mirarnos.

__ Parece que estamos conectados.- dijo mirándome, yo también lo mire y no pude describir lo muy sumergidos que estábamos en esa mirada... hasta que:

__ Entonces, a donde vas? Háblame de ti.- dijo por fin haciendo que pudiera pestañar.

__Iré a casa de mis abuelos por tres semanas, y... de mi no hay mucho que contar la verdad no hay nada emocionante.

__ Me gustaría cambiar eso.- dijo pero no logre escuchar bien ya que lo dijo con voz muy baja y de fondo estaban las voces de las personas hablando a nuestro alrededor y haciendo pedidos.

__Que?.-Pregunte.

__ Que yo también iré a casa de mis abuelos faltan pocos meses para graduarme así que vengo a pasar tiempo con ellos.- dijo y yo lo fulmine con la mirada porque sabia que no había dicho eso.

__ Ellos son muy tiernos los amo mucho y me encanta escuchar sus historias..

__ Aquí tienen.- dijo el camarero entregándonos el pedido de forma para llevar ya que el bus tenia un limite de espera y nos tocaría comer en el. mateo lo tomó y pago.

Entramos y nos sentamos en nuestro asiento abriendo las bolsas mientras que las otras personas entraban y tomaban asiento o comían al igual que nosotros. Dios! este pollo esta malditamente delicioso, no se si es por mi hambre pero quisiera que no se acabe, reí para mi.

Terminamos de devorar el pollo, y note como me miraba Mateo muy entretenidamente, y eso no dejaba de ponerme nerviosa así que solo dije..

__Gracias por todo Mateo.- Dije para así no sentirme tan observada. 

__ Tienes algo Hay.- vi como sus ojos se dirigían a mi mejilla, y sus manos hacia ellas con una servilleta, Oh no! no te acerques tanto,  demonos podía sentir su respiración, como es que causas tantas cosas en mi Mateo si apenas te conozco joder. 

__ Es kétchup.- dijo mientras me limpiaba, Dios! su cercanía me estaba estremeciendo de una manera inexplicable, será que me había enamorado de este chico desconocido.  

  

Llegando A Mi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora