Llevo tiempo ya sentado observando las veloces y ruidosas máquinas del hombre pasarse por las calles empedradas, estoy agotado pero todos los días, al caer la noche me miento al decirme que mañana será un mejor día, pero hoy es distinto, un hombre a tocado a mi puerta, vino a venderme el sueño de una mejor vida, un lugar para reposar hasta el fin de mis días, me ha dicho cosas maravillosas, he quedado cautivado, no por su propuesta engañosa, sino por la facilidad para usar las mentiras y mezclarlas con una verdad.
No puedo creer hasta donde ha llegado nuestra especie, obligar a mentir para sobrevivir, que crueldad tan más grande, que locura, los humanos sin duda ostentan el título de la raza más cruel de este mundo, pero no podemos cambiar un sistema que ya está podrido, solo queda destruirlo o dejar que nos consuma como el fuego consume a una vela.
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Delirios de un viejo
Short StoryNo es más que la historia de un viejo consumido por la agonía de un planeta que no lo merece, un pobre diablo que no sabe distinguir entre la realidad y la ilusión.