[ La portada es temporal ]
Era un dia soleado, perfecto para un dia de campo, salir con amigos, ir de paseo al parque, etcetera, pero para este chico de unos 21 años, esos dias no era para practicar tales actividades, si no, leer, leer y mas leer.
-Ah....vamos, dale un beso y ya-
Se encontraba Shin recostado en su cama sosteniendo un libro con ambas manos, el cual, no leyó el titulo, solo lo agarro y se tiro a su lectura que duraría hasta terminarlo completo.
Aveces pensaba que debía buscarse un trabajo ya que era mayor de edad, vivía solo y se sostenía con el dinero de uno de sus familiares, vaya vida.
Cayo la noche rápidamente, ni el mismo se había dado cuenta, siempre la lectura lo tenía atrapado.
El reloj marcaba las 9:00 pm.
Fue a la cocina y tomo lo que primero que vio, helado.
-uhm-
Llego a pensar también que debía comprar otro libro en ese momento ya que había acabado el anterior y no tenia con que entretenerse.
Salio afuera y fue en busca de una novela romántica en una de las librerías de la ciudad, que por suerte, aun seguía abierta -bien- se dijo así mismo; antes de poner un pie en el establecimiento, una persona con capucha fue hacia el e intentó quitarle sus pertenencias a la fuerza.
-¡n-no! ¡alto!- Shin hacia el intento de defenderse pero el asaltante era mas fuerte.
-¡sueltame!- gritaba, de la nada, otro hombre llegó y golpeo en la cabeza al de la capucha haciendo que cayera al suelo desmayado.
-a-ah....- el chico se había asustado totalmente.
-¿estas bien?- pregunto su "salvador", un hombre de buen rostro que enamoraría al instante a cualquier mujer, llevaba ropa informal y sus cabellos obscuros estaban algo despeinados.
-s-si lo estoy...- respondió a su pregunta suspirando un poco.
-dejame ayudarte- extendió su mano al chico para que se levantara, Shin la tomo con cuidado y se levantó con su ayuda.
-en verdad...gracias...- el chico bajo un poco su cabeza. Al momento que había sostenido su mano le llego una sensación extraña.
-no hay de que-
-.........-
Se quedo en silencio no sabia otra cosa que decir aparte de agradecer.
-me llamo Kouta, ¿tu eres?-
-no te importa...-
Giro la mirada, se sintió nuevamente extraño cuando una persona dijera su nombre a alguien desconocido.
-!lo siento! ¡t-tengo que irme!-
Corrió rápidamente dejando caer su billetera por accidente.
-¡espera!-
Dijo Kouta, el cual, fue ignorado, tomó la cartera y sacó la identificación -Shintarou....-
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Nuestro futuro [Historia chicoxchico]
RandomHabla sobre un chico de 21 años que se preocupa más por sus libros que por su propia vida. Un incidente lo reunirá con alguien y con otros que quizás cambie totalmente la forma de ver las cosas y la vida misma.