- "No se puede saber que es el odio si antes no has probado a que sabe el amor." Eso me dijeron una vez, me quede sin palabras por un instante, y mis pensamientos entraron en debate con mi ser. Respondí sin saber, pero al instante supe que esa no era la respuesta correcta, y pensé en cada momento en que mi mente y corazón entraron en conflicto sin saber por qué.
-"... quien no ha amado, jamas podrá saber que perdonar es como chuparse una naranja muy dulce, condenar es guardar almendras en el corazón." Tras una conversación transcurrida salió de unos labios esa frase sin sentido y algo preocupante. "Yo perdono, pero no olvido, y condeno a quien merece ser condenado."
* Yo no quiero que tu amor sea ese estar sin estar de la luna en el cargo.
* "... en las noches sin luna la soledad me alumbra."
* "... me pediste una estrella, y cruce el ancho firmamento para buscarla."
Ahora no sé si te he regalado mi amor o es solo un deseo lo que pongo entre tus manos a brillar ... Yo intento decir te amo, pero la voz se me vuelve ola, y se destroza entre los arefices de mi boca; yo intento decir te amo, y solo me brotan flores de la boca. Yo intento decir te amo, pero tú no comprendes esta perseverancia de ola, este aleteo, y este perfume abriéndose para ti cada mañana."
<< Uno debe ser y jugar como el peón, un solo paso a la vez. >>
Yo: Vargas Vilas habla, se expresa de la mujer. Yo, yo hablo de ese ser que humilla y maltrata a la mujer, que durante siglos se ha creído superior a ella. Según la biblia la mujer fue creada de una costilla, para así ser iguales, no inferior, o superior. Ellos solo tienes la autoridad que nosotros les demos, nosotras no nacimos con vocación de alfombra, por lo mismo no nos puedes pisotear. Los hombres no son imprescindibles, pero hacen falta. Porque somos más sensibles, y nos expresamos diferente, somos capaces de sonreír, y merecemos recibirlo. Si ellos se creen que tienen esclavas, están muy confundidos. El hombre para ser hombre, necesita tres partidas, hablar poco, hacer mucho, y ser alguien en la vida.
El hombre es un ser malvado y caprichoso, que finge estar enamora hasta que su objetivo se haya cumplido; suplica y pide perdón, y es tan grande su obsesión, que sufre solo cuando no puede lograr su mala intención. Una vez me dijeron: "Todos no somos iguales, las mujeres son peor! ... La mujer no es peor, pero se cansa de ser humillada, se revela y hace a otros lo que tanto han recibido. Ellos nunca se fijan en lo que hacen ellos, solo en lo que hacemos nosotras, y luego no entienden el porqué de las cosas. No se dan cuenta de que nos lastiman, que duele más un gesto que una palabra. "Todos son iguales." Si hacemos una encuesta, esta sería la respuesta con más de un 90%. ¿Por qué? Pues porque es lo que demuestran... solo mira a tu alrededor, y verás... si no lo haces eres una niña, una estrecha y si lo haces, eres facilona, una ofrecida, muchas se confunden y por miedo al rechazo, toman decisión que no quieren, yo pienso en mí, y los demás que piensen lo que quieran. Si te hacen nos hacen sufrir, hay que aprender a pagar con la misma moneda.
Muchos piensan que soy mala, porque trato de siempre estar alegre y sonreírle a la vida, de aparentar estar alegre, cuando solo yo sé toda la tristeza que llevo dentro y que con nadie alivio. Solo tienen que llegar a conocerme bien, y verán cuantos sentimientos encierro en mí.
En mi mente habitan dos personas, una de 3 años, y otra con cierta madurez avanzada para la edad correspondiente. Son los sueños y las fantasías los que me levantan cuando la vida me golpea. Esa otra mitad, mi otra persona, la que me permite analizar la vida y personas, para sí entenderlas, y aprender de ellas. Es ese ser dentro de mí el que me permite hablar, escuchar y entender.
Aquel que lea estas líneas, tendrá el placer y la tortura de llegar a conocerme bien, o al menos ver este rompecabezas que es mi ser.
Si hay algo que me gusta más que ayudar a otro, son "los niños", esa persona pequeña que aún no sabe lo cruel que puede llegar a ser la vida. Los animales, otra pasión no correspondida, mientras más salvajes y peligrosos, más interesante de conocer. Mi tiempo... ese que pasa sin saber por qué, lo gasto viendo TV, a coleccionar fotos de animales y artistas, a escribir, y escuchar la radio. Es la dicha de aquellos con oro, que vivimos parados en el tiempo. Soy muy sencilla, y frágil como el cristal. Algunos dicen que soy como la droga, aquellos que prueban la delicia de mi labio, se vuelven adictos.
Como la luna, tengo muchas caras, pero en realidad es solo una; dependiendo de en que punto de la vida me conozcas. Como la serpiente dejo la piel para que una nueva nazca y me renueve. Me han comparado con muchas cosas, en parte me parezco, en otras no.
Cuido cada minuto de mi tiempo, ese que dejaste atrás, ya no volverá. Peligros siempre abran, pero eso no me impide ir lo más lejos que mis pies me permitan llegar. Camino con la soledad en compañía del silencio y la luna, que ahí siempre esta, aunque no la veas. Es ahí cuando me invaden pensamientos, en la noche sin reflejos, cuando solo se oye la música de los grillos y el sonido del viento. Cuando todo eso sucede, me doy cuenta de que es como un sueno, en el que escribo en el aire leves palabras de mis recuerdos. Recuerdos que se forman de ilusos pensamientos y frágiles gotas de mis sentimientos.
Nota:
A la autora,
aunque no me sirvan de nada estas letras, aunque no gane nada al decirte lo que pienso y tú solo me des a cambio respuestas incompletas, déjame al menos el privilegio de seguirte conociendo, es un privilegio y tú lo sabes, para que volver a decirte las cosas que ya desde anoche están grabadas en tu memoria....
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Confeciones
Short StoryEstas son confesiones entre un profesor y su alumna en el salón de clases.