Jimin y Jungkook fueron novios en la preparatoria, pero su relación no resultó ser tan sincera como se creía, por lo que decidieron terminar. Años después, se reencontraran en la misma empresa como jefe y subordinado. Jungkook no reconoce al nuevo J...
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Jimin se removió entre las sábanas de su extensa cama intentando encontrar la fuerza de voluntad que necesitaba para abrir los ojos. Sentía como si le hubiesen golpeado la espalda toda la noche y agradeció que fuese su día libre, porque no soportaría ir a trabajar.
Se sentó en una orilla aun con los ojos cerrados, tanteando con las plantas de sus pies el frío suelo para encontrar sus pantuflas y al fin ponerse de pie. Caminó hacia la puerta y salió de su habitación con dirección al baño, pero cuando intentó entrar a este, no pudo, debido a que estaba bloqueado.
— ¡Taehyung! Necesito orinar —se quejó con voz adormilada mientras golpeaba la puerta.
—Es Hope quien está en el baño —escuchó la voz de su amigo desde la sala y no dudo en acercarse.
Tae se encontraba como cada fin de semana, sentado frente al balcón del pequeño departamento, mientras pintaba sobre un enorme lienzo cosas que Jimin ni siquiera entendía por más que lo intentara. Su arte era abstracto y hermoso, bastante popular en la ciudad; Tae vivía de su pincel al igual que Jane Austen vivió de su pluma, eso le hacía sentir orgulloso.
— ¿Cogieron anoche? —preguntó sin vergüenza alguna, sentándose sobre el sofá mientras rascaba su brazo sobre la tela de su pijama con flojera.
—Solo hacíamos Yoga —musitó el joven de cabellera azul volteando a mirar a su amigo—. Si las personas que te conocen en el trabajo, te vieran ahora, definitivamente se espantarían —comentó burlón.
Jimin se encontraba con un camisón mucho más grande que él, al igual que sus cómodos pantalones. Su cabello estaba amarrado arriba por una coleta desordenada que le dejaba la frente a la vista, en sus mejillas se marcaban los dobladillos de la almohada y sus ojos estaban hinchados.
—Claro, conozco esa clase de Yoga, me dicen que soy bueno en ello —comentó Jimin también burlándose, por lo que Taehyung le lanzó a la cara un pequeño pañuelo que usaba para limpiarse las manos.
— ¿No era tu día libre? ¿Qué haces despierto? —comentó Hoseok llegando a la sala con ropa cómoda y el cabello húmedo.
—Si, pero la temporada de primavera de la revista está a punto de comenzar y tengo un par de reuniones hoy —dijo con fatiga cayendo acostado sobre el sofá.
— ¿La exposición de arte de Taehyung no caía la misma fecha que el lanzamiento de temporada? —cuestionó Hope, tomando asiento a un lado de Jimin.
—Prometiste que estarías allí —dijo Tae.
—Y lo estaré, el lanzamiento de la temporada será en el día y la exposición será en la noche.
— ¿Qué pasa si tienen una cena de celebración? —volvió a decir Hoseok.
— ¿Debemos pasarte buscando? —cuestionó Taehyung.
—Digo que todo saldrá de acuerdo al plan ¿Okay? —suspiró cansado y sus amigos decidieron solo asentir.
Jimin nunca se había perdido ni una sola de las exposiciones de sus mejores amigos y tampoco lo haría esa vez. Había hablado con su superior con suficiente antelación para hacerle saber que no podría quedarse con ellos luego del lanzamiento de temporada.