Larry || Especial

B O D A

24 de Septiembre, 2020.
➪ Casa Stylinson, LA. 10:56 PM.

Después de un pesado día en el estudio, Harry ve a su pareja en la cama que ambos compartían mientras le dedica una sonrisa que recibe de vuelta.

— Hey, Hazz. ¿Cómo estás, amor? —Preguntó Louis mientras se sentaba en la cama.

— Muy cansado, fue un día muy pesado.

El ojiazul soltó una risa, y estiró sus brazos en dirrección al rizado.

— Ven a dormir cariño, ya es un poco tarde.

— Sí, por favor, quiero dormir para siempre. — Dijo Harry mientras se ponía su pijama.

— Pero si duermes para siempre me dejarás solito. — Soltó el castaño haciendo un puchero, el cuál Harry no dudo en besar.

Louis era la persona más tierna del mundo y todos sabían eso.

— Nunca te dejaría solo, mi amor. Siempre estaré contigo. — Prometió mientras se metía a la cama y abrazaba a su marido.

— Te amo sweet cheeks — Dijo el de ojos azules mientras respondía el abrazo.

— Yo te amo más, boo bear.

Luego de una media hora abrazados en la gran cama, Harry se encontraba completamente dormido, mientras que, Louis solamente daba vueltas y vueltas.

Su cabeza estaba trabajando mucho y muy rápido, necesitaba calmarse. Salió de la habitación directo a la cocina, ahí se preparó un té de manzanilla y lo tomó en el sofá de la sala.

— ¿Lou?... —Preguntó Harry saliendo de la habitación. — ¿Qué pasó? ¿Estás bien, cariño?

— Oh Hazz, nada sólo no podía dormir ¿Tú que haces despierto, amor? —Preguntó mientras veía como Harry se servía té y se acurrucaba a un lado de él.

— No te vi y quería saber dónde estabas.

— Oh cariño, lamento haberte despertado. —Se disculpó el castaño.

— No importa Lou, te amo.

— Yo más Hazz, muchísimo pero muchísimo más. — Si bien el silencio reino el lugar, no fue para nada incómodo. Y luego de unos minutos de pensar en aquel tema, Louis volvió hablar. — Oye Harry...

— ¿Sí, Lou?

— Estuve pensando... — Se quedó callado otros segundos, causando un poco de desesperación en el ojiverde.

— ¿Y en qué pensabas cielo? — pregunto mientras se incorporaba en el sofá

— ¿Qué te parece si renovamos los votos? — Preguntó tímido — Ya sabes, para celebrar nuestro aniversario.

— Oh... —El rizado se lo pensó unos segundos y luego sonrió causando que pequeños hoyuelos se notarán en sus mejillas — Me parece una muy linda idea, Lou. ¡Me encanta!

— ¿Entonces sí?

— Por supuesto que sí, mañana le decimos a los chicos — se quedó callado por unos segundos mientras pensaba en algo — Jeanne y las chicas nos pueden ayudar a planear todo.

La pareja se miró y soltaron una carcajada.

— ¿No creés qué las chicas nos maten por tan repentina decisión?

— No lo creo — Negó Louis —Además, ellas nos aman.

— Cierto —Exclamó Harry. —¿Quién no podría amar al amor de mi vida?