Era un 30 de Octubre en el que todas nuestras vidas dieron un cambio brusco.
En la noche de Halloween, mis amigos y yo decidimos hacer algo divertido en este día que todos consideraban como el día en que los demonios se liberaban de sus tumbas. Abby, la que me gusta desde preparatoria, Brad, mi mejor amigo, Lucy, la novia de mi mejor amigo, y Peter, mi hermano.
Brad nos lleva a su casa para celebrar halloween como todos los años lo celebramos (ni más ni menos, siempre eramos los mismos). Pero jamás iba a pensar que ese día iba a ser diferente a todos los demás Halloween's que celebramos.
Al entrar a casa de Brad lo primero que hice fue comenzar a observar cada adorno de su casa, tenía una hermosa alfombra, unos cuadros hermoso que seguramente a sus padres les costaron más de 1 millón de pesos (Brad ya me había mencionada aquella historia de esos cuadros, hechos por un artista famoso de París).
—Les voy a traer algo chicos -dice emocionado-
-Nos sentamos todos en el Living esperando su llegada-
—Chicos... tengo algo que enseñarles -llega emocionado ocultando algo tras de su espalda-
—¿Qué mierda es eso? -dice Lucy-
—Cariño... es una tabla para contactar los muertos -dice con tono escalofríante sobreactuado-
-Brad lleva la tabla hacia la mesa de centro con un pequeño triángulo de madera-
—¿Y eso que es? -pregunto dudoso-
—Es el objeto con el que el espíritu se conectará para contestar nuestras preguntas
—Saben que chicos, yo me voy. Esto es una locura, ¿de verdad creen en estas estupideces? -hace un gesto burlesco-. Ya tienen 18 años, maduren por favor -dice Abby-
—Hey Abby, calma... es solo un juego... -dice Brad-
—Un puto juego en el que no saben con quien se están metiendo, así que, tienen 3 segundos para quemar esa puta tabla de mierda -dice Abby furiosa-
—Ni que fueras nuestra mamá -dice Brad-
—Chicos, ya, es una estupidez discutir por una simple tabla, juguemos y ya, que malo podría pasar -digo con tranquilidad-
—¡Cierto! ¿qué malo podría pasar? -dice Lucy-
—Pues, ¡entonces juguemos!
—Vale -dice Brad-
Comenzamos a observar la tabla puesta en la mesa de centro. Brad coge el triángulo de madera con un raro símbolo en el centro (un ojo al parecer).
—Chicos, coloquen sus dos dedos índices en cada extremo del triángulo
Hicimos caso a lo que dijo y comenzamos a colocar nuestros dedos en el triángulo
—Vale... ¿y ahora qué? -dice Abby enojada-
—Necesito que digan conmigo: "Demonios del más allá, los manifestamos esta noche, les permitimos la entrada a esta casa, y les permitimos que se manifiesten en el tablero"
Tras repetir esta frase todos juntos, el movimiento del triángulo se manifestó. Quedamos anonados con el hecho ocurrido.
—Pero que MIERDA a pasado -dice Abby -
—Chicos, quiero irme, no me siento bien -dice Lucy asustada-
—Brad, ¡¿que mierda fue eso?! -digo enojado y asustado-
—Chicos, no se alteren -exclama Brad-
—Mejor no juguemos a esto chicos, estoy asustada... -dice Lucy-
—Vale amor, tu tranquila, no pasará nada... -dice Brad-
Comenzamos a llevar el triangulo a la zona de abajo en el que dice ''Adiós''. Es en ese momento en el que las luces de casa se apagaron instantaneamente.
—Chicos, quedense aquí -exclamé-
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La Ouija
ParanormalUna inesperada noche de Halloween un grupo de amigos se atreven a jugar por primera a vez a La Ouija. Pero, lo que no sabían... es que al jugar con esa tabla por primera vez, van a revelar una cantidad de demonios sueltos, que quieren adueñarse de...