🌾Es tan corto el amor y tan largo el olvido🌾

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"Cada partida es una clase de muerte, del mismo modo que cada reunión es un tipo de cielo".











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-Me pregunto si encontró su propia paz muriendo. -Dijo Jean.

-Tal parece que la única manera de encontrar la libertad es dejando este mundo. -Yelena miro a Jean con una cara de tristeza, no soltaba lagrimas, pero parecía que caerían en cualquier momento. -¿Crees que Hanji merecía morir?

-La comandante merecía una vida feliz, como todos nosotros.

-¿Aún si mato a una parte de sus subordinados? -Pregunto Yelena.

Jean se cuestionaba constantemente, estaba seguro que no existía el bien o el mal, nadie de la legión estaba seguro que pasaría después de salir de las murallas, al final, todas las decisiones que tomen, es y será, para el bien de la humanidad.

Después de pasar mucho tiempo con la comandante lo único que podía pensar sobre ella, era lo poco cuerda que estaba. Todas la decisiones que la orillaron a su muerte tuvieron sentido.

Para Jean, Hanji era extraña, sonriendo en los momentos más difíciles, reconfortando a las personas cuando incluso ella necesitaba de alguien para posar su cabeza en un hombro.

Jamás se quejo, jamás vio una lagrima.

Solo una mujer decidida, un poco harta del mundo en el que vivía, pero nunca rindiéndose.

Incluso si nunca encontró la clave de como salvar el mundo, jamás seria ella la culpable de las decisiones que otros tomaron y que también la orillaron a su muerte.

-Nadie, al menos en este mundo tan cruel merece una muerte como esa.

-Es triste porque ahora el se quedara solo. -Yelena masajeo su cien, tratando de reconfortarse a si misma. - Imagina compartir los mismos sueños con alguien y jamás lleguen a realizarse.

-Imagina amar tanto a alguien y nunca volverla a ver, así se debe sentir el capitán ahora.

-Hemos visto una parte de ellos y tan solo pensarlo, me aterra demasiado el sentimiento. -Contesto Yelena.

El castaño lo entendía perfectamente, no porque realmente amará de la misma magnitud a alguien, si no porque lo vio con sus propios ojos, como era amar a alguien cuando la situación no es la adecuada.

Cualquiera que estuviera lo suficientemente cerca del capitán Levi y de la comandante Hanji reconocería el aura de confianza y entendimiento que ellos poseían.

Tan iguales, tan certeros, ambos parecían ser lo único que existía para cada uno.

Se amaban, no lo admitían en publico por miedo a las represalias, pero lo hacían, en realidad Armin noto algo en ellos la primera vez, ninguno de sus compañeros se tomo el tiempo para observar con detenimiento la situación que envolvía a los dos únicos veteranos de la legión.

Ese día en la playa, no solo le abrió un camino para ver más allá del exterior a la humanidad, si no también el nivel de calidez que podían conocer el uno con el otro.

El capitán Levi reprendiendo a Hanji por no ser cuidadosa con lo que tocaba en el mar, tomándola del brazo como si fuera una niña pequeña, siempre con una cara genuina de preocupación.

Y la imagen más pura de dos personas, mirando la puesta de sol, ensimismados, pensando que no hay nadie ahí, sólo ellos.

Armin lo comprendió, observando esa imagen tan cercana, tan llena de vida, como dos personas no necesitaban tocarse o decirse palabras melosas para amarse profundamente.

Solo necesitaban entenderse y estar cerca para percibir el amor recíproco de cada uno.

-¿Alguien más lo notó? -Pregunto Armin a sus compañeros que yacían sentados en la arena mirando también la puesta de sol. -Al capitán y a la comandante Hanji.

Connie, Jean y Sasha parecían confundidos con las palabras de Armin a excepción de Mikasa y Eren, quienes no estaban sorprendidos de sus palabras.

-¿Acaso no es obvio? -Dijo Eren. -Siempre han sido cercanos, mucho más ahora que el comandante Erwin no está.

-Parecen nuestros padres. -Mikasa los observo por un momento, fijo su mirada a las manos de ambos, casi rozándose, queriendo unirse. -Apuesto que se casarán algún día.

Connie, Jean y Sasha finalmente comprendieron las palabras de los tres amigos, y asintieron con la cabeza. Después de todo, no era una sorpresa lo tan cercanos que son Hanji y Levi.

El castaño realmente se convenció en ese momento que todo iba a ser posible. La felicidad genuina para una mujer como lo fue Hanji Zoë

Quizás se fue demasiado lejos al imaginarla corriendo por el campo con sus propios hijos, para Jean no era tan difícil soñar con los finales felices.

Hanji Zoë no era su madre, el ya tenia una, sin embargo no podía dejar de sentir su corazón oprimido al saber que se murió.

Todas las veces que ella cuido de ellos como si fueran sus hijos.

Nunca les falto afecto.

Hanji Zoë los protegió hasta el día de su muerte.

Arriesgando la felicidad con el hombre que tanto amaba. Hanji Zoë es el siguiente paso a la libertad, el elemento especial de una ave.

Las alas que le otorgaban el impulso de irse lejos y ver el mundo sabiendo que no existe nada que se lo impida, sin cadenas, sin ataduras.

Y estaba seguro que lo seguiría haciendo en otra parte, sin importar si estaban lejos de ella.











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No me vayan a funar solo por tratar de escribir fanfics tristes😂

Estoy consternada porque no me imaginaba escribir esta última parte con una perspectiva que no fuera la de Levi, mi inspiración cambio derrepente cuando estaba en el trabajo y decidí darles la perspectiva del escuadrón 104, quienes considero son como sus hijos del Levihan 😂.

Mi propósito de este fic era darle una despedida a Hanji y la verdad no ha pasado mucho de ese suceso en el manga, todavía me siento melancólica y extraño a mi rinoplastia Zoë (La llamo así por como se ve en el nuevo poster de SNK).

Hasta luego~~~


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Hasta que la muerte nos una.  🌾Levihan🌾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora