Sobre Las Nubes

Mi nombre es Mariana Belmonte.
Trabajo para la aerolínea Wonder Airlines.
Soy una azafata recién salida de la academia y siempre he querido viajar por todo el mundo, pero es crecer poco a poco, mientras volare en vuelos nacionales.
Me pongo mi traje rojo brillante, acomodo mi mascada y por último mi boina roja con una pequeña paloma bordada con hilo dorado.
Tomé un gran respiro y con una sonrisa salí del vestidor a la recepción de la aerolínea, donde se encontraba la capitana del avión que sería mi nuevo casi hogar...

-Hola, Mariana, bienvenida, se que acabas de salir de la academia de azafatas, soy Nancy Cuevas y espero que seamos buenas amigas- dijo muy amable.

En un momento gire la cabeza y vi entrar por la puerta principal a un azafato muy apuesto.
Cabello ondulado con un pequeño mechón suelto que caia por su frente, nariz con perfil griego, ojos pequeños color grises, pestañas rizadas y con un cuerpo claramente ejercitado. Era demaciado perfecto, pero mi visión fue interrumpida por Nancy, al atravesarse enfrente de mi...

-Mira, te voy a explicar. El es Aaron, es el chico más guapo de la tripulación y claro, mi novio.

Me sentí muy avergonzada por eso, seguro vio que puse cara de tonta al ver a ese hombre así que decidí voltear a ver a otro lado.
Todos nos preparamos para recibir instrucciones en línea.
Eramos 6 azafatos, entre hombres y mujeres, eran Nick, Aaron, Sofía, Nicolás, Karla y yo.
Hablábamos entre nosotros cuando llegó Nancy...

-Bien, jóvenes, nuestro destino son Los Cabos, Baja California.

Yo miraba a mis compañeros, que miraban fijamente a Nancy, estaba un poco nerviosa, cuando Aaron volteo a mirarme, con una sonrisa perfecta...

-Mariana... Mariana... ¡¡MARIANA!!

Grito Nancy, yo desperté de ese trance que me hizo sentir Aaron...

-¿Si? Nancy.

-¿Quieres repetirme lo que dije?

Me quedé callada, mientras todos me miraban...

-Eso creí, mira Mariana, esta entrando a un equipo muy unido y no quiero reportarte por no hacer bien tu trabajo.

-Lo siento Nancy- conteste apenada.

Un poco avergonzada, me pusieron a recibir a los pasajeros del vuelo.
Veía de todo un poco, desde viejitos gastando su dinero de la pensión en viajes con sus camisas Floreadas, niños que supuse que estarían llorando todo el vuelo, jóvenes chicas,
buscando alguna aventura en su destino, un apuesto pasajero me sonrio.
Cerré la cabina y me dirigí a revisar a los pasajeros que tuvieran su cinturón de seguridad.
Me fui a sentar a mi asiento para después despegar a la aventura de mi nuevo trabajo.
Sonó el timbre que anuncia que estamos listos para atender a los pasajeros. Fui a donde estaban los víveres y me encontré a Nick...

-Hola Mariana, bienvenida, te iba a hacer una sugerencia, Nancy puede ser un poco estricta, pero es inofensiva.

-¡Oh! Pues muchas gracias, ¿Eso creo?

En ese momento llegó Aaron, la verdad me puse nerviosa pero no lo demostré, se acercó a mi...

-Hola, me llamo Aaron, bienvenida, no le hagas caso a Nancy, es muy estricta en su trabajo.

Yo un poco sonrojada por esos ojos grises le conteste...

-Si, gracias, es solo que no debe ser fácil, tiene la gran responsabilidad de la satisfacción de tantas personas.

Me encontraba preparando el carrito de los víveres, cuando Aaron se acercó a mí diciéndome...

-Te enseñaré como se hace.