Entre flores y tinta
Los personajes de esta historia no me pertenecen.
Advertencias: Este fanfic está basado en un AU, por lo mismo la personalidad de los personajes se ve afectada de acuerdo al entorno en que crecieron. Puede contener violencia como también material sexual explícito y muchas otras referencias. ¡Recuerda leer las notas finales!
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—¿No eres alguien demasiado serio para tener una floristería?
—Y usted ¿no es demasiado alegre para ser un tatuador?
Ante el intercambio de palabras, Xiao Xingchen alza la ceja y de pronto, quiere reír como desquiciado.
Xiao Xingchen solo ha ido a saludar al nuevo local que ha sido abierto en la plaza comercial de "Yi City" y ha terminado con un enredo de palabras que le mueven la fibra más sensible y fácil del humor que posee.
¿Con qué cara se lo dice?
Si bien, siempre ha sido un hombre de humor voluble y armonioso, uno pensaría que sus tatuajes y piercings delatarían su profesión, o al menos lo reconocerían como un hombre que se mete en problemas y que es todo menos "amable o alegre" la fama de los tatuadores y artistas rudos estaba demasiado estigmatizado, la mayoría de las veces la gente huiría a al menos un metro de distancia por miedo a que fueran ladrones o "malas" personas.
Sin embargo, ahora un joven de cabello negro y largo atado en una trenza lo miraba fijamente, inhalando aire con el resentimiento medido calcado en cada una de sus facciones. No lo culpaba, pero las palabras indulgentes ya habían salido de su boca sin proponérselo.
Xingchen rasca su nuca y da una sutil reverencia a modo de disculpa —Creo que ha malinterpretado mis palabras— un "ja" se cuela al final de la oración y sus ojos grises se desvían a la cantidad de flores que tienen en exhibición. El joven de ojos negros solo lo mira fijamente—Solo digo, que uno no esperaría encontrar ese rostro cuando visita una floristería...
— ¿Y qué rostro debería tener? —Cuestiona el dueño, su semblante sigue tan serio como hace unos segundos, pero el ligero brillo de sus ojos delatan curiosidad. Xiao Xingchen lleva su dedo índice a la barbilla mientras se agacha, fingiendo oler las flores. —Alguien con una gran sonrisa que te desea un buen día ¡alguien que contagia alegría!
Tras su declaración el chico de cabello trenzado ladea el rostro sin entender del todo — ¿Qué tiene que ver eso con las flores? —Xiao Xingchen suspira y mueve su mano como si el tema no fuera relevante ¿cómo le iba a decir que su rostro serio va a deprimir a cualquier que entre a esa tienda? aunque... Entrecierra sus pestañas, su semblante y porte es de un hombre atractivo, uno serio y mortal pero que no esperarías ver en un trabajo como este. Tal vez en una oficina, con un traje elegante mientras su asistente personal le lleva el café y no en un local lleno de flores, con un mandil amarillo con detalles negros.
—¡En todo caso! —Niega varias veces de nuevo, sacando esos pensamientos innecesarios de su cabeza —¡Quiero Girasoles!— El chico de cabello largo se mueve sin decir más, se coloca un par de guantes y toma 6 girasoles para llevarlos a un aparador de cristal, donde los extiende sobre papel. Corta, enreda y acomoda cada flor con tanto cuidado y maestría que finalmente Xiao Xingchen puede creer que no se trata de una broma de mal gusto o de un chico que solo tuvo mala suerte de conseguir un empleo que no le gustaba. Dedos largos y ágiles se alzan entregando el ramo sin decir una sola sílaba.
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Entre flores y tinta
RomanceUna nueva floristería ha abierto en la plaza comercial "Yi City" Song Lan, en su primer día se encuentra con un joven tatuador bastante peculiar, mientras su jefe, el heredero de los Jiang se encarga de resolver su turbio pasado. A Nie Mingjue nunc...