Parte XVIII

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(Sehun)

Traer a Luhan a mi cuarto no fue tan mala idea como pensé que sería han pasado unos días desde que comenzamos a compartir mi cuarto y ya me acostumbré a que cada mañana es diferente, ayer estaba cepillando su cabello mientras murmuraba una canción y ahora está sentado en el piso hablando con el zorro sobre lo que hizo ayer

-creo que los zorros no hablan idioma humano-se giró con las mejillas enrojecidas

-deja de asustarme-se quejó cubriendo su rostro, me sonreí de lado

-ven aquí, no me has dado mis besos de bueno días-alejo las manos de su cara y me miro con molestia

-no volveré a caer en esa mentira, aun me duele el brazo

-no te voy a morder, ven aquí-se levantó para irse a otro lugar, pero apenas alcance su brazo lo empuje a la cama acorralándolo entre mis brazos, deje un beso sobre sus labios-buenos días-murmure

-buenos días-sonrió con un poco de timidez, tomé su brazo y corrí la manga para ver que la mordida que hice ayer aún seguía ahí- ¿aun duele? -asintió

-eres un bruto

-y tu un traidor, estuviste todo el día con ese marques de no sé qué-Luhan se sonrió aguantando la risa

-no deberías ponerte celoso-murmuro acariciando mi mejilla-ya te dije que te pertenezco

-no puedo evitarlo...soy demasiado territorial con mis cosas

-soy una persona-se quejó riendo al sentir como me colocaba sobre el con demasiada suavidad provocándole cosquillas, con los días aprendí que Luhan es muy cosquilloso, odia las tormentas porque lo ponen nervioso y que adora salir a jugar al jardín después de que llueve importándole poco acabar con barro por todos lados

-lo sé-conteste para luego dejar un beso en su frente-también eres mi esposa

-eso no me hace menos persona-se quejó haciendo un puchero, negué

-al contrario, te hace mi persona favorita en el mundo-susurre para luego dejar un beso en su mejilla, Luhan me abrazo por el cuello dejando que le hiciera mimos deje besitos por su mejilla y cuello, cada vez se me hace menos difícil demostrarle mi cariño, incluso me está agradando que mis mañanas sean así...felices

-entonces ahora te agrado mucho

-nunca dejaste de agradarme en el fondo-comente en un susurro recostándome en su pecho-solo estaba enojado -me quede quieto mirando un punto en la pared, Luhan sin que me diera cuenta decoro la habitación hizo cambiar las cortinas, puso alfombras y pequeñas mesitas con candelabros muy bonitos al igual que un librero, transformo el espacio que solo ocupaba para dormir en un pequeño hogar acogedor y lleno de luz, no sabía lo agradable que era acurrucarme en su pecho hasta ahora

-deberíamos levantarnos

- ¿Por qué? Tienes algo que hacer además de hablar con esas mujeres

-te recuerdo que tu hermana es una de esas mujeres

-desde que regresamos ya ni siquiera la reconozco-comente estirando mis brazos

-quizás maduro

-tu pareces maduro, pero te gusta jugar a las escondidas antes de tomar el té

- ¿Qué tengo que ver yo con tu hermana?

-que tú eres más natural...-me apoye en mis brazos-a noche llovió-Luhan me miro con esa cara de infantilidad que suele poner cuando quiere jugar por ahí, me pare y corrí mi cabello hacia atrás-abrígate si vas a ir por ahí corriendo.

El Secreto Bajo La Falda / Hunhan OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora