CAPITULO 13 "PREPARACIONES" PARTE 2

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DONOBAN

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Nos metimos a bañar, pero más que baño, era que la necesitaba, quería sentirla, escucharla gemir de pasión y deseo, el mismo que yo sentía, solo le di tiempo de abrir las llaves, ya que estaba desnuda y se veía hermosa, con su enorme barriga, y un cuerpo de ensueños, me éxito tanto, la gire, ya que me estaba dando la espalda, al mirarla a los ojos pude ver el deseo que sentía ella también, la bese con mucha pasión y deseo, ella lo correspondió, la recargue en la pared y la apreté con mi cuerpo al sentir mi peso gimió sobre mi boca y su suave sabor dulce llegó a mi garganta, ya no me pude contener más, la tome de sus nalgas y la levante, ella abrió sus piernas y las enredo en mi cintura para que me dejara entrar más rápido, así lo hice, entre en ella sin separar mis labios de su boca tan deliciosa, que me volvía loco de pasión, gimió más fuerte y yo comencé a embestirla muy despacio, quería sentirla, disfrutarla, estaba cada vez más mojada y eso me estimulaba más, sentir que ella se venía, sentirla cada vez más mojada, no lo soporte más, aumente el movimiento al punto que ya no estaba solo gimiendo, si no, que estaba gritando de placer, una de mis manos, que estaba en sus nalgas, la subí y comencé a masajear uno de sus pechos al mismo, los apretaba fuerte con mis manos y ella mas gemía, nos venimos al mismo tiempo, seguimos unidos hasta que nuestra respiración se normalizo, salí de ella y la bajé con cuidado, nos bañamos mutua mente, como siempre.

Salimos del baño y nos vestimos, se veía tan sexi con esa bata de maternidad azul, que tuve que usar fuerzas sobre humanas para no arrancárselo y hacerle el amor, otra vez.

Bajamos a desayunar, y tuve que estar alejado de ella, ya que solo mirarla me excitaba a un extremo incontrolable, decidí distraer mi mente preparando el desayuno, entre a la cocina y comencé mientras ella se sentaba en una silla del comedor, terminé de cocinar y coloque todo en la mesa y me senté en frente de ella, me miro con ojos de suplica, que me hacían gracia.

-espero que esto sea para los dos- me dijo- ya sé que eh estado comiendo mucho, pero no es para tanto-

-si amor, no te preocupes es para los dos- dije con media sonrisa, ya que si era solo para ella, ya que últimamente estaba comiendo demasiado que parecía que en vez de comer para tres era para cuatro y lo mío también.

-pero para que quieres ir a hablar con el consejo- le pregunté.

-tenemos que organizar las cosas, conociéndolos, han de tener un ejercito preparado para atacarnos y tenemos que estar preparados para cuando eso suceda, y mas que solo me falta mes y medio para dar a luz, tenemos que preparar todo- me dijo todo de carrera y muy sería, jamás la había visto hablar así y eso me sorprendió.

-pero eso lo están arreglando Helena e Ian, para que tú descanses- le dije para tranquilizarla, pero no funciono

-crees que me voy a quedar de brazos cruzados esperando el momento en el que se desate la guerra, no lo creo, a demás, necesito hablar con ellos, pero bueno, hablando de Helena e Ian en donde están- me sorprendió su respuesta pero ella aún no entendía lo peligroso que era para ella, sé que es la rencarnación de Gea y que ya recordaba todo nuestro pasado, pero no entiende lo peligroso de la situación

-los deje en el prado, pero iban a ir con el padre de Helena y a buscar a un comandante para llevarlos y pudiera ver el terreno y después irían con la madre de ella para preparar la casa para que des a luz- le explique lo que nuestros amigos estaban haciendo

DESTINO DE AMOR (SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora