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Después de ver a Jeongwoo tocar What is love? se quedó pensando Haruto en como un hombre podría verse así de lindo cantando una canción de Twice.

— Bajemos a cenar —soltó de la nada—. La abuela debe estar esperando.

— Cierto, tienes razón —su primo le dio la razón.

Con un ademán de Haruto, siguieron al chico hasta la cocina donde se encontraba la abuela riendo a carcajadas por lo que su yerno decía.

— Abuela —sonrió Jeongwoo—. Se ve muy feliz.

— Lo estoy mi pequeño —sonrió al chico.

Se sentaron todos y se dispusieron a comer, la cena era pizza casera. La abuela sabía hacerla y era de sus especialidades.

— Te quedó riquísima la pizza abuela —habló Junghwan feliz.

— Concuerdo con Junghwan —habló Mashiho.

— Sí abuela —aduló Jeongwoo.

— ¿Algo que decir Haruto? —preguntó su madre mientras este mordía la pizza.

— Bue...na pizz...a —dijo con la boca llena.

— Que asco Haruto, no hables con la boca llena —le riñió su madre y la abuela soltó una risa.

— Gracias por los halagos hacia mi pizza —sonrió la mujer.

Terminaron de cenar y cuando estaban a nada de pararse la abuela habló.

— No hemos distribuido los cuartos para los niños.

— Oh cierto —Ichiro Watanabe habló—. Madre, dinos.

— Junghwan y Mashi duermen juntos —sonrió la abuela.

— ¿Eso significa que Jeongwoo y yo compartiremos habitación?

— Sí —aplaudió la abuela—. Así se llevan bien.







***

— Tu línea, mi línea —hizo una raya imaginaria en la cama King size—. No debes cruzar la línea —frunció el ceño mientras el coreano lo veía confundido.

— ¿Algo más mi señor? —se burló del japonés y este frunció más el ceño.

— Nada más —se cruzó de brazos—. Duérmete.

— Está bien —acató la orden y se acostó observando a Haruto.

La noche empezó a transcurrir tranquilamente y Haruto tenía miedo de dormir con un desconocido, nunca en su vida había dormido con otro hombre que no fuese su hermano e incluso prefería dormir con el depravado de Yoshinori que con el coreano.

Haruto tenía la mayor parte de la cobija haciendo temblar a Jeongwoo.

— Tengo frío —habló mientras temblaba.

— Abrázame —dijo Haruto con un tono de sueño.

— ¿Eh?

— Abrázame Somi.

— Así que Somi, eh —se burló. Abrazó al chico por la cintura y durmieron ambos plácidamente.

Pasaron las horas y Jeongwoo despertó primero percatandose que nunca soñó el incidente de la madrugada.

— ¡Ah! —gritó separándose del japonés. Provocó que el chico se despertara.

— ¿Qué haces gritando a las...—miró la pantalla de su celular—. 7 de la mañana?

— Tuve...tuve una pesa...silla —entrecerró los ojos.

— ¿Pesadillas? ¿A los 15?

— Tengo 16 —dijo con molestia.

— ¿Quién tiene pesadillas a esa edad?

— Buenos días —la puerta fue abierta dejando ver a Junghwan.

— Buenos días —giró el rostro hacia el chico y le sonrió.

— ¿No vas a saludarme Haruto? —entrecerró los ojos el menor

— ¿Y tus modales?

— No lo diré —rodó los ojos.

— Anda, sí —fingió que se iba a poner de rodillas.

— Jeongwoo san, niisan, bajen a desayunar —cerró los ojos, la pena estaba en su cara. Tenía años sin usar honoríficos.

— Gracias Junghwan —se burló.

— Haré que te hagan usar honoríficos —frunció el ceño.

Jeongwoo sonrió. La risa de Haruto era el sonido más hermoso que había escuchado y eso que el tocaba la guitarra.

Bajaron las escaleras, el desayuno estaba listo, la abuela despertaba temprano para hacer el desayuno junto a su hija.

— Huele delicioso abuela —el menor de todos habló mientras se sentaba.

— Jeongwoo, ¿Aún tienes tus costumbres coreanas o ya te adaptaste a Japón? —Suni preguntó.

— Ya me adapté totalmente a Japón señora Watanabe.

— Dime Suni —sonrió la mujer mientras ayudaba a servir los hotcakes.

— En una semana es navidad —la abuela habló—. Ahorita que acabemos de comer haremos la rifa del santa secreto.

— ¡Itadakimasu! —Ichiro Watanabe habló.

— ¡Itadakimasu! —respondieron todos.

Después de que el desayuno pasará, la abuela empezó a escribir el nombre de todos en papelitos para hacer la rifa del santa secreto. Era una tradición familiar. Haruto la recordaba muy poco ya que 5 años sin ir a pasar vacaciones con la abuela era diferente.

Mashiho fue el primero en sacar un papel, tocándole su padre de Santa secreto.

Por otro lado Haruto le tocó Jeongwoo, quien conocía poco. A Jeongwoo por su lado, le tocó Junghwan.

Así sucesivamente fueron sacando papeles hasta que se acabaron.

Tenían una semana para comprar los regalos. El tiempo empezaba a correr desde ya.

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⏰ Última actualización: Oct 06, 2020 ⏰

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Tokyo [HaJeongwoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora