Tu sonrisa

Capitulo 18 Segunda oportunidad (Part 2)

              Desde el momento que toco sus labios supo que debía ir despacio pero que seria muy difícil conseguirlo, tenia todo planeado. Una rica cena esperaba en la cocina junto al vino favorito de Gulf, música suave seria puesta en el momento justo.  Le había llevado mas de un mes arreglar todo para que hoy todo fuera perfecto. Pero escuchar en el tono mas sexy que el hubiera escuchado antes "por favor Mew hazme el amor" basto para que todo se fuera al carajo. 

Me volví a abalanzar sobre Gulf devorando su boca, irrumpiendo en ella sin ningún tipo de autocontrol. Acercándome lo mas que pudo a el tomándolo de la  cintura para después ir deslizando mis  manos hacia su espalda un pequeño gemido salió de su boca y fue música para mis oídos y una motivación mas, como si hiciera falta otra, para mi polla. 

-Adentro-dije despegándome un segundo de sus bellos y apetecibles labios. De un salto enredo sus piernas en mi cintura y yo sujete su bello trasero con mis manos, con una sonrisa picara que no le conocía dijo

-Llévame tú- dándome un pico. Este chico definitivamente no tenia ni idea lo que causaba en mi. Pasaba de ser un hombre terriblemente sexy, a un niño dulce y eso me volvía loco

-Si supieras todo lo que provocas en mi, todo lo que quiero hacer contigo-vi sus ojos oscurecerse mas mordiendo sus labios- adoro cuando haces eso-dije volviendo a besarlo.

Como pude y tratando de no caernos llegamos al cuarto mientras el iba despojándome de la ropa y riendo a la vez. Dejándolo sobre la cama me incorpore para verlo mejor. Y por favor en mi vida había visto algo mas bello. Sus cabellos revueltos, sus labios hinchados y enrojecidos su cara sonrojada y sus ojos esos ojos que me hacían perder la cordura. Acercándome lentamente dije

-Llevas mucha ropa todavía, me siento en desventaja- tomando su saco para sacárselo el tomo mis manos viendo un dejo de duda cruzar por su mirada- Por favor dime que no quieres parar justo ahora Gulf porque creo que moriré si dices eso.

Negó con la cabeza- Es que hace bastante que no hago esto y ....

-Confías en mi?-dije y el asintió- entonces no te preocupes y disfruta- terminando de sacarle lentamente la ropa hasta quedar completamente desnudo y volviendo a empujarlo a la cama.

Mantuve los ojos en el hombre silencioso debajo de mi, mientras me inclinaba entre sus piernas fui bajando lentamente llevando mi lengua hasta  su polla. Las piernas de Gulf se tensaron y se alzaron e inmediatamente moví mis manos a sus caderas. Levante la mirada y vi los ojos abrazadores de Gulf, quería hacerlo despacio, muy lento pero no me lo ponía nada fácil. Cuando pase mi lengua por su longitud un gemido ahogado salió de el, sonreí, sabia sabroso mas de lo que imaginaba, lamí sin cesar mientras sostenía sus muslos, soltando gruñidos de placer seguí lamiendo hasta mi dedo tanteo su núcleo.

-Debo prepararte cariño- me levante y saque del cajón de la cómoda una botella de lubricante y condones.

-Muy confiado-dijo con una media sonrisa.

-La fe es lo ultimo que se pierde-dije.

Volví a mi posición anterior poniendo antes un poco de lubricante en mi mano, despacio fui acariciando su erección con una mano y con la otra sus muslo tensos pasando mis dedos sobre su pliegue mientras volvía besárlo. Al sentir mi dedo en esa zona el cuerpo de Gulf se tenso.

-Relájate, respira- susurre en su oído

-SI- dijo contra mi hombro.

Gentilmente y utilizando todo mi autocontrol presione mi dedo contra su pequeño pliegue y lentamente fui moviendo mi dedo dentro de el, sus ojos se cerraron mientras sus lenguas volvieron a empujarse. Deslice mi dedo mas profundamente mientras sentía como Gulf lo absorbía

-Otro mas?- y el asintió, Lentamente dos de mis dedos ya estaban dentro de el podía sentirlo tomar aire y soltarlo mientras trabajaba con mi dedos dentro suyo.

-Eres precioso-dije. Se veía magnifico recostado debajo de mi, mirándome con absoluta lujuria en sus ojos, esto era mil veces mejor de lo que había imaginado- Estas bien?

Nerviosamente lamio sus labios y asintió.

-Ya no puedo mas Gulf-dije con voz temblorosa- Te he querido tener así desde que nos conocemos.

-Entonces ya no te contengas-dijo

-Por Dios mírate, vas a matarme-jure

 Mi respiración venia en ráfagas cortas y rápidas. Cuando su lengua salió a tocar mi labio inferior, mirándome enfocado e intenso. Cerré los ojos.

-Abre los ojos. mírame-dijo. Me enfoque en el, quien me daba una mirada ardiente. - Eres tu, desde el primer momento supe que serias tú-dijo acunando mi rostro.

Tan pronto como las palabras fueron dichas ,perdí el poco control que me quedaba. Tome un condón y mas lubricante para mi ansiosa erección.

-Tratare de ir lento, pero no prometo nada-dije

Cuando mi punta toco el borde de Gulf, el calor penetro el látex entonces muy cuidadosamente empecé a moverme para ingresar en el. La cabeza de mi polla se encontró con la resistencia del cuerpo de Gulf y cuando estaba por retirarme siento como el poderoso hombre frente a mi levanto sus cadera y me atrajo hacia el y casi me ahogo por quedar sin aire al curvarme por el placer que obtuve.

-Lo siento gatito, tu lo pediste- entonces realmente empecé a moverme empujando contra el en un ritmo constante y cuando sus bocas se encontraron con un choque de lenguas todo el cuerpo de Gulf vibro y yo sentí una maldita sobre carga de placer. Gemidos inundaron la habitación. Gulf se aferro a mis caderas.

-Ya no aguanto mas Mew-dijo y sentí mi propio clímax correr por mi columna vertebral para comenzar ese familiar dolor en las bolas que lo llevarían a un increíble orgasmo, Las caderas de Gulf se movían con mas energías y su climax lo golpeo con fuerza en un caliente spray de fluido blanco cremoso sobre nuestros pechos, grite una obscenidad y mi clímax también me golpeo.

-Eso fue malditamente irreal.-dijo con la sonrisa mas bella que vi en mi vida.

Antes de que nuestros labios se conectaran nuevamente, pase mis manos por sus cabellos desordenados y dije

-Deberá hacerse responsable señor Kanawut porque me pegare a usted como un maldito abrojo- sus ojos brillaban llevo su mano a mi mejilla.

-Me encantaría tenerlos pegado a mi en todas la formas que me estoy imaginando en este momento, señor Suppasit - dijo con picardía

-Nunca te dejare, chico irresistible, déjame ayudarte a cumplir tu promesa.-mis ojos se clavaron en el desesperado por su respuesta.

Me atrajo hacia el y esta vez el beso fue lleno de amor y ternura.

-Solo tú podrías hacerlo- me dijo