epílogo

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Parpadea algunas veces. No esta segura si solo es una broma de mal gusto. O si después de tantos años de haber escrito estos posts en Tumblr para el chico que nunca la amó él los haya leído y le haya respondido.

Recuerda cuando escribió cada uno de ellos. Sus emociones, sus sentimientos encontrados. Recuerda con cariño y amor los años que pasó apoyándolo a él, a los otros cuatro chicos que también estaban en la banda cumpliendo su sueño.

CNCO.

Fueron gran parte de su vida. Él fue gran parte de su vida.

"Mamá, ya viene el tren." Escucha la voz de su pequeño quien está apretando su mano para llamar su atención.

La estación de tren en Nueva York es la mas ocupada del mundo, y sabe que si no es una de las primeras en línea para entrar al vagón se quedará afuera. El chirriante ruido lastima sus oídos, haciéndola que vuelva a ver hacia otro lado.

Su corazón esquiva un latido al ver a ese castaño tan cerca. Esas facciones no las confundiría con nadie más en el mundo. Nunca había estado tan cerca de él.

Pasa saliva con dificultad, no quiere parpadear por el miedo de abrir los ojos y darse cuenta que ya no está.

Pero es él.

"¿Mami?" su niño vuelve a llamar su atención y instintivamente lo vuelve a ver. "¿estás bien?" pregunta preocupado.

"Si." Asienta mientras vuelve a ver a la misma dirección otra vez.

Y su peor miedo se vuelve realidad.

Ya no está.

"Solo vi a alguien."

"¿A quien?" pregunta su hijo mientras suben al tren.

Ella se acomoda en un asiento, sentando a su pequeño en sus piernas, mientras mira por la ventana al mismo tiempo que el tren empieza a andar.

"Al chico que nunca me amó." Contesta en un susurro, abrazando a su hijo más fuerte.

LA CHICA QUE SIEMPRE ME AMÓ - Christopher VélezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora