Capitulo XVII

222 28 0
                                    

Había llegado al hospital justo a tiempo para el turno que le tocaba, la mañana estuvo muy ajetreada al parecer se había producido un accidente del cual se hizo cargo de la mayoría de pacientes que ingresaban, la hora del almuerzo llego y con ello salió del trabajo para dirigirse a la cafetería, al parecer había dejado su billetera en su auto.

Se encamino hasta el estacionamiento del Hospital tomando el ascensor, al salir camino un poco hasta que encontró su auto, abrió la puerta y en aquella chaqueta que yacía en el puesto del piloto, encontró lo que buscaba en uno de sus bolsillos.

Cerró la puerta de su auto dejándolo con seguro cuando vislumbro a alguien que caminaba sin sentido y con una de sus manos en su estómago y observo con sorpresa que la camisa de aquella persona estaba manchada de sangre, sin pensarlo dos veces corrió hacia aquel sujeto pero a medida que se acercaba iba reconociendo a aquella persona como su vecino Tay, al verlo así su corazón incremento sus latidos de forma drástica y se acercó a él apenas lo sostuvo este cayo desmayado entre sus brazos.

Tomo su teléfono y llamo a su amiga Jennie a la cual pidio ayuda y unos minutos después llegaron algunos paramédicos con una camilla al estacionamiento y lo ayudaron a llevarse a Tay  dentro del Hospital.

Llego a emergencias y vio que Tay perdía sangre pidio que le trajesen unas pintas de sangre mientras lo trasladaba hacia la sala de cirugía, la operación había durado dos horas entre remover la bala y las transfusiones de sangre realizadas, cuando termino de operar y salió de aquella sala respiro tranquilo y su corazón se tranquilizó.

Eran cerca de las 5 de la tarde cuando Tay despertó se acercó hacia el para verificar su estado, ya no estaba pálido y su tono de piel comenzaba a ser el usual lo cual lo aliviaba.

-Donde estoy pregunto.- lo último que recordaba era caer en los brazos de alguien, intento levantarse pero un dolor agudo proveniente de su estómago lo detuvo

-Puedo preguntar que te paso dijo New.- esa pregunta rondaba su mente que había pasado para que su vecino llegara en ese estado al Hospital

Ahora debía de inventar algo para que no hubiese sospechas y debía de averiguar si New había llamado a la policía.

-Intentaron robarme pero no los deje y aquellos sujetos me dispararon, conduje hasta el hospital más cercano y bueno el resto ya lo sabes dijo

-Llamamos a la policía vendrán dentro de unos minutos

-Gracias respondió.- ahora necesitaba hablar con Arm y que arreglara esto para lo cual necesitaba su teléfono

Cuando New lo dejo solo en aquel cuarto se levantó de manera lenta, dio lo que creían ser los pasos mas difíciles porque el dolor proveniente de su estómago era muy fuerte, busco su ropa hasta que lo encontró en una funda de color negra, busco su teléfono y cuando ya lo tenía llamo a Arm al cual tuvo que explicarle toda la situación.

Paso cerca de una hora cuando la puerta de su habitación se abrió dando paso a unos oficiales a los cuales explico la situación y con la ayuda de Arm logro que se fuesen y lo dejaran solo.

Cerro sus ojos y suspiro había encontrado una pista bueno no mucha pero había algo que le intrigaba mucho cuando hablo con aquel bar tender este le dijo que el negocio de Joss nunca desapareció pero según los informes que tenían cuando este entro preso y la mayoría de personas lo creían muerto sus socios había buscado otras organizaciones dejando o acabando con la que el tenia, nada cuadraba y aquello lo frustraba.

La puerta se abrió dando paso a New el cual traía consigo una bandeja de comida, se acercó lentamente y la colocó a lado de Tay el cual agradeció y empezó a comer, platicaron de su día y bueno New le conto de cómo lo encontró y de los días de descanso que debería de tomar una vez obtuviera el alta médica, no solo hablaron de aquel día ya que las anécdotas aparecieron trayendo consigo risas brillantes que dejaban deslumbrados a las dos personas que se encontraban en esa habitación.

.

.

.

.

Había salido desde temprano de aquel lugar donde se estaba quedando con sus compañeros había esperado este día ya que era el cumpleaños de la persona que hacia latir su corazón de forma desenfrenada, paso por algunas tiendas buscando un regalo que le gustara a su mayor pero no encontraba nada.

Su estómago empezó a rugir pidiendo comida camino un poco más hasta que se detuvo cerca de una cafetería a la cual ingreso y pidio un americano y n postre no era de las personas que comieran aquella como su primera comida pero en aquel momento no le importaba, terminó lo que pidio y cancelo la cuenta, salió del local con más energía para seguir buscando el regalo perfecto para Krist.

Se detuvo al frente de una joyería y vio a través de la vitrina que daba para la calle un colgante que llamo mucha su atención, entro a aquel lugar y pidio ver un modelo igual como el que acababa de ver mientras esperaba que la chica viniera con su pedido la puerta se abrió de nuevo dejando entrar a un hombre que venía acompañado de dos personas más que al parecer eran sus guardaespaldas.

La chica llego con el colgante y lo tomo le gustaba la forma que tenía como si fuese un sol, entonces aquella vendedora le explico que aquel collar era de pareja y que en el centro de aquel sol había una luna y le mostro otro colgante, sonrió y tomo el otro colgante, compro aquellos colgantes le gustaban mucho y más porque eran de pareja.

Cuando se disponía a salir de aquel lugar vio como al hombre que ocultaba su rostro le era entregado una caja con un reloj de oro, no le tomo mucha importancia hasta que escucho que este hablaba por teléfono puesto el altavoz y alguien en la otra línea le gritaba aquella situación le daba risa la cual le duro poco cuando escucho que la persona al otro lado de la línea le decía <<Joss maldito sabes que no puedes salir así verdad que pasa si te encuentra la policía sabes que te buscan ¿Verdad?>>, no escucho más lo único que hizo automáticamente fue dar la vuelta e intentar ver el rostro de aquel hombre pero no lo logro puesto que este salió del local y subió a su auto marchándose de inmediato de aquel lugar.

Tal vez había escuchado mal además había muchos Joss en la ciudad y también estaba el hecho de que Joss Wayar estaba en una de las prisiones mejores vigiladas así que no debía de asustarse por nada y debía sumarle el hecho de que si escapaba Off se enteraría de aquello y se los hubiese comunicado, negó con su cabeza.

Subió a su auto y se marchó de aquel lugar.



InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora