Ya arriba abrí la puerta de mi cuarto.
- Wow, si que no movieron nada...- Dije sonriendo y entrando.
- Si, es exactamente como lo recuerdo.- Dijo Sebastián.
- Ni siquiera éntraste...-
- No, pero desde el balcón se ve todo...-
Fui a mi escritorio, no estaba mi cuaderno...
- ¿Todo bien? - Me dijo Sebastián.
- Si... no es nada...- Dije yo.
- Se lo qué pasa...- Dijo el mirándome.- ¿Por que no les dijiste de tus visiones?-
Lo voltee a ver.
- Pues, por que es algo qué pasa, hace... dos meses... es algo repentino...- Dije.
- Si... oye si se parece a ese actor... ¿Como se llamaba?...- Dijo el acercándose.
- Pfff, ¿Aidan Gallagher?...- Reí.- Obvio...-
- Cambiando de tema... ¿extrañas a Jhonatan?- Dijo el directamente.
Lo mire mal, no me gustaba como me hizo sentir esa pregunta, Jhonatan era mi novio en donde vivía, pero ...
- Yo... no quiero responder eso...- Le dije.
-Mmmm y ¿como te sientes de qué ves. A cinco?...- Me dijo.
Lo mire mal.
- Se que querías ser psicólogo pero eso no es justo...- Le dije buscando ropa para ponerme, ridiculo si solo tenía uniformes.
- Sabes que lo hago por que me preocupo por ti, y por qué noté que tenías rencor guardado...- Dijo el acordándose de el golpe.
- Jaja, eso, bueno fue un impulso, pero...- Pensé en él como antes.- Pues, obvio lo extraño, ya que es mi hermano..., no lo puedo odiar para siempre...- Le dije sacando un uniforme.
Se lo mostré.

- Bueno... ¿Te puedes ir? Me voy a cambiar...- Le dije mirándolo.
- ¿Que?, soy como tu hermano vamos....- Sebastián dijo.- Si quieres me volteó.-
- Bueno... de hecho necesito ayuda... es que la camisa no sale se atoro.- Le dije intentando que me saliera la estupida camisa.
- Ah si si, claro...- Dijo el.
Mi camisa estaba atorada en mis brazos, no veía nada.
- ¡Jalalo!- Le dije.
- Pues levántalo...- Dijo el.
- Oye, a ver estoy en brasier no veo que estas haciendo, por qué la camisa está atorada en mis hombros...- Le dije seria.
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The umbrella academy - Tu Inmadurez
RomanceEsta historia no tiene mucho que ver con la serie, o sea no tiene los mismos sucesos. Esta historia habla de amor con núm. 5, pero no todo es eso.