W I N E ㅣYOONMIN ㅣ

Capitulo 1

El aire se sentía pesado en el ambiente, las risas ya no se escuchaban más, la sala que anteriormente era invadida de sonoras risas ahora estaba en silencio.

Lo habían hecho nuevamente.

Yoongi soltó un suspiro de frustración tratando de no ser notado por los ojos frente a él. Esto cada vez lo irritaba más y disimularlo ya estaba siendo un problema, trato con todas sus fuerzas de no rodar sus ojos y solo por el hecho de que sabía que era observado no lo hizo. Se removió un poco sobre su asiento y escuchó como Namjoon, de nuevo, trataba de solucionar la incomodidad del lugar, todos rieron y aplaudieron al unísono frente a sus palabras para después cortar la grabación.

Nadie dijo nada mientras Jimin y Jungkook solo sonrieron con timidez.

Se podría pensar que Yoongi ya estaba acostumbrado a este tipo de escenas, todos charlando sobre el grupo, riendo y divirtiéndose, para después ser interrumpidos por comentarios fuera de tono provenientes de Jungkook y Jimin.
Esto pasaba 2 de cada 3 entrevistas pero aún así a Yoongi le disgustaba, siempre siendo Namjoon el regañado por las acciones de los menores, siempre siendo su líder quien tenía que lidiar con los juegos absurdos de la pareja.

Después de aquella escena incomoda todos se encontraban de regreso al hotel, esta vez yendo todos en el mismo automóvil, el silencio estaba presente, nadie había dicho nada sobre la escena de la pareja pero aún así se sabía por demasia que el intenso silencio se debía a ello.

— Mmmg – El más joven del grupo carraspeo tratando de llamar la atención de las personas en el auto, lograndolo casi con todos, pues Yoongi ni siquiera se inmutó, su mirada seguía fija en la ventana de su lado derecho viendo las gotas estrellarse contra el cristal, tratando de ignorar la patetica disculpa que se venía.

— Yo, lo lamento, en realidad Jimin y yo lo lamentamos de verdad— Dijo mientras tomaba la mano de su novio junto a él, el cual solo bajo la mirada con una tímida sonrisa en sus labios.
Yoongi, aunque trataba de ignorarlos, no pudo evitar notar dicha acción colocando los ojos en blanco con irritación justo al instante.

— No volverá a suceder, pensaremos más en nuestra acciones y... — el menor fue interrumpido de golpe.

— No importa, Jungkook, comprendo, es algo que no se puede evitar, esas cosas suceden— Dijo el líder con voz dulce y serena que aunque en la pareja provoco tranquilidad en el rapero solo removió su estomago, dándole la sensación de vómito.

Cuando el líder estaba por proseguir con su patetico discurso, Yoongi ya no puedo más.

Por primera vez en todo el viaje giró su rostro y enfrento la mirada de perro regañado del maknae, apretó sus dientes con rabia y por fin lo soltó.

— ¡No! ¡No, Namjoon! Estoy harto de estos patéticos juegos, estoy harto de que crean que todo esto se soluciona con una estupida disculpa — Soltó el pelinegro, su voz sonando dura y firme, claramente molesto.
Jungkook abrió sus ojos en respuesta a tales palabras, sorprendido por ello, que, aunque no era la primera vez que escuchaba a Yoongi molesto, si era la primera vez que este contradecía a su líder.

— ¡Esto no es un jodido juego! Ya no somos niños, joder, dejen de ser tan estúpidamente egoístas y pensar en las consecuencias de sus acciones, ¿Es que no ven que al final quién termina siendo reprendido es Namjoon? ¿Es que a caso no les importa nada más que ustedes? ¿No ven que cada una de sus acciones repercuten al grupo? — continuo el rapero sin siquiera dejar al menor defenderse.

Yoongi solo temblaba de enojo, sus manos cerradas en puños, estaba tratando con todo su ser retener su ira y no soltar más palabras hirientes que sabía que en un futuro se arrepentiría de decirlas, pero es que aquello tenía que parar, aunque sus palabras sonaran duras, solo había dicho lo que nadie se atrevía a decir, ni el mismo Namjoon.

El silencio regresó al automóvil, el cual solo fue interrumpido por los leves sollozos provenientes del pequeño rubio sentado del lado izquierdo que era abrazado por su pareja buscando reconfortarlo.

Yoongi volvio a dirigir su vista a la ventana, ignorando las miradas acusadoras de Hoseok que se había mantenido en silencio todo este tiempo.
Pero no le importaba, Yoongi solo había sido sincero y no se retractaría por más miradas que este le lanzara, aunque muy, muy en el fondo, escuchar al dulce rubio llorar, le hacia dudar, el odiaba ver a su pequeño Jimin llorar y ahora el mismo lo había provocado.

...

— No lo puedo creer — Hoseok no había tardado más de 5 minutos en aparecer en su habitación una vez que todos bajaron del auto.

— Si solo viniste a reprenderme mejor retírate — dijo el pálido mientras se quitaba su chaqueta y la colgaba con delicadeza en el armario.

Hoseok solo bufo mientras se arrojaba a la cama.
A diferencia de lo que Yoongi creía, este ya no hablo más y solo se dedicó a observar cada uno de los movimientos que hacia sobre la habitación. Cuando por fin contaba con su pijama, que consistía solo en una playera blanca y pantalones de chándal, se sentó sobre la cama junto al cuerpo tendido de su amigo.

— ¿Qué es lo que te irrita tanto, Yoongi?— soltó por fin su amigo, rompiendo el agradable silencio, bueno, el que al menos era agradable para el pelinegro.

— No puedo creer que sea al único que le moleste esta situación, no debería ser yo a quien reprendas hoy, deberías estar en la habitación de Jungkook y Jimin haciéndoles entender que esto no es un juego — contestó con cierta irritación en su voz, mientras se acostaba junto a Hoseok, ambos con su vista hacia el techo blanco del lugar.

— Están enamorados, no lo pueden evitar — trató de justificarlos, queriendo hacer comprender a su amigo que no era algo que el pelinegro pudiera entender, solo era amor, eso era, no podían reprimir esos sentimientos que invadían sus cuerpos porque eran demasiado, solo florecían de forma natural y al estar todo el tiempo frente a cámara, solo no podían reprimirlos, ellos querían demostrarse el uno al otro cuanto se amaban sin importar nada más.

Pero aquellas palabras no tuvieron el efecto que Hoseok esperaba, no, Yoongi solo sintió de nuevo esa incómoda sensación en su estomago, apretando sus dientes tratando de ignorarla, si, sus amigos estaban enamorados, ¿por qué el solo pensar en ello lo ponía de tan mal humor?

— No es una excusa— el pelinegro giró su cuerpo para ver a su amigo a su costado. — Taehyung y tú no son como ellos.

Hoseok soltó una dulce risa aun sin despegar su mirada del techo.

— Cada quien lo demuestra a su manera, tal vez no actuamos igual que ellos pero, el reprimir las ganas de tomar su mano, de besarle, no es algo fácil, Yoongi, Tae y yo también cometemos errores frente a cámara— contestó el pelicastaño con voz dulce, en verdad quería hacer comprender la situación a su viejo amigo.

— Eso es a lo que me refiero, es difícil, si, pero aún así lo hacen, lo hacen porque saben que su amor y relación es cosa aparte de nuestro grupo, ellos solo consiguen que las cosas sean más difíciles para Namjoon, esa es mi molestia — Soltó un bufido— Parece importarles más su estupida relación que nosotros.

Y fue ahí donde Hoseok comprendió todo.
Aun así, se tomó unos momentos para preguntar aquello, manteniendo el agradable silencio por un poco más de tiempo.

— Lo extrañas, ¿No es así?

Y soltó aquellas palabras, aquellas que removieron miles de cosas en el interior del joven a su lado, el cuál, aunque sabía exactamente a qué se refería, prefirió fingir ignorancia y alzar una ceja tratando de aparentar desconcierto.

— No sé a que te refieres — Tragó saliva y sintió su corazón latir demasiado rápido, no quería hablar de eso, solo no quería.

Hoseok por fin se dio la vuelta y enfrentó la mirada de fingida confusión de su amigo.

— Jimin.

Y no necesito decir más.

El pelinegro frente a él solo desvío su mirada y sonrió de lado.

¿Qué si lo extrañaba? Joder, si.
¿Qué si esto se debía a sus celosos por verle con Jungkook? Solo, solo un poco.