Nunca había visto algo similar
Cleopatra sentiría celos,
por el mar de belleza que lleva en ella
Su rostro delicado,
Que ante un hermoso atardecer resalta
Las siete maravillas del mundo
Han añadido su rostro a la lista
El cabello formando un manto negro
Y suave como el algodón
Brilloso como diamante y como el sol Al amanecer
Sus labios tallados a la perfección
Y rojizos como el rubi
Embellecen su dulce sonrisa
Una sonrisa que inspira felicidad
Que sería un placer ser el causante de la misma
Una sonrisa que rejuvenece el alma
Sus ojos almendrados
Y cristalinos como el agua
Desde ellos el mundo debe verse mejor
Ojos que transmiten una mirada llena de pasión
Piel de seda
Las estrellas imitan su esplendor
