El encendedor.

27 2 0
                                    

¿Qué piensas cuando ves un encendedor?
...

Yo por mucho tiempo lo ocupaba para des aburrirme,era un gran pasatiempo que tenía.
Tomaba mi encendedor y lo prendía cerca de mi piel, lo dejaba ahí hasta que comenzaban a rodar lágrimas por mis mejillas; Pero era algo entretenido ver como mi piel poco a poco se hacía roja y cada que el dolor se intensificaba más acercaba el encendedor.Aunque al principio de verdad dolía mucho, poco a poco me acostumbraba y hasta me llegó a gustar.
Un día en la escuela mis compañeros estaban fumando y me dieron a probar por primera vez el cigarro, pero una maestra venía hacia nosotros y rápidamente apagué el cigarro con mi mano y lo tiré, en este momento no me importó lo que pasaba a mi alrededor si no me concentré en lo bien que se sintió apagar el cigarro de esa forma. Después de eso compraba cigarros para apagarlos y prenderlos una y otra vez. La había encontrado otra utilidad a mi encendedor.
Fue ahí cuando comencé a fumar y me gustaba llegar al final del cigarro para poder apagarlo en mis brazos o piernas.

Siempre intentaba que no quedan las marcas, pues no quería que me preguntaran acerca de ¿Por qué lo hacía? Era una respuesta que ni yo misma tenía. Sólo era algo que me gustaba hacer así como me gusta dibujar y leer era algo similar a eso.
Poco a poco me fue aburriendo, pero aún conservo las marcas de ese feo pasatiempo que tenía. Aún cuando llego a fumar un cigarro lo apago a veces con los dedos pero ya no siento lo mismo que antes; de hecho me duele creo que me duele más que antes cuando quemaba mi piel con el fuego.
Y sólo por si acaso siempre tengo un encendedor cerca.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 05, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Quemaduras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora