💞 One shots 💞 Camus Bowl

❄️ Sálvame •| Saga x Camus

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Sálvame

( Saga x Camus) ♊️

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En una oscura habitación, un hombre de gélidas orbes azuladas se encontraba absorto en sus pensamientos, dado la hora todos en la orden debían estar descansando, todos excepto él.

1:00 AM

Pronto su tormento llegaría.

Para todos él era el inquebrantable caballero de Acuario. Sin embargo, lo que nadie sospechaba es que desde las sombras lo manipulaban.

❬❬ El patriarca solicita tu presencia.❭❭

Esas palabras fueron el inicio de su tormento.

Desde aquel día el santo de hielo había sido condenado a complacer los bajos deseos de aquel que alguna vez fue su compañero de armas e instructor en batalla.

— Ese cosmos... — susurró al sentir la presencia de un invasor en su templo.

No había duda, era él.

El santo de hielo no pudo evitar apretar con fuerza las sábanas bajo su cuerpo, conocía perfectamente las intenciones con las que aquel hombre venía a su templo.

— Me estabas esperando? — preguntó con burla el recién llegado

El Acuariano fijó sus gélidos orbes azulados en aquella imponente figura, cuyos pasos resonaron hasta detenerse delante de la cama, sin inmutarse ante la cercanía, aquel hombre lo tomó del mentón para posteriormente delinear con su pulgar los finos labios del peliaqua.

— Saga? — susurró recibiendo una mirada malévola por parte del enmascarado quien procede a sentarse a su lado, bajando con lentitud una de sus manos para recorrer lascivamente las piernas del menor quien no pudo evitar exaltarse.

No, ese no era Saga.

Era Arles, el lado más oscuro de Saga.

— No me toques! — exclamó empujando al mayor al sentir una de sus manos tocar con descaro su miembro.

— Oh vamos, como si no lo disfrutarás, Camus — esbozó deshaciéndose de aquella máscara, dejando al descubierto unos imponentes orbes carmesí, acompañado por una larga y albina cabellera.

— No eres Saga!

El actual patriarca esbozó una sonrisa malévola al escuchar aquellas palabras, sin duda lo excitaba la actitud desafiante del santo de hielo, aquella fiereza con la que se le oponía lo hacía llegar al climax. Por esa razón había decidido tomarlo como su amante. Sin embargo, Saga siempre se encargó de frustrar sus planes, su otro ser amaba al Acuariano, lo había amado desde que era un niño pero se negaba aceptarlo, por eso en un inicio cuando se apoderó del santuario, Saga lo mandó a Siberia.

Quería mantenerlo a salvo.

❬❬ El favorito del patriarca❭❭ pensó con gracia.

Con Camus, Saga encontraba la tranquilidad con la que aplacaba la oscuridad dentro de él. Lo amaba, pero no podía protegerlo por siempre, no cuando Arles y él tenían el mismo deseo de poseerlo. Por lo que dominado por su lado malévolo arremetió contra quien más amaba.