El Soldado Nazi (EN PAUSA)

Septiembre...

1 de septiembre e 1939...

Mi nombre es Bulma Brief, tengo 17 años, soy judía polaca, hace poco me mudé a Alemania con mi familia en busca de nuevas oportunidades.

Estaba sentada viendo por la ventana, las hojas de los árboles caían lentamente al suelo, otoño....mi estación favorita al igual que la primavera.

Escuché el crujido de las oxidadas bisagras, la puerta de mi habitación estaba siendo abierta.

-¿Qué haces cariño?-mi madre..

-solo veo las hojas de los árboles mecerse con el viento-dije dándome la vuelta para observarla mejor.

-está bien amor, el desayuno estará listo pronto-dijo recostándose en la puerta.

-¿Qué es lo que desayunaremos?-dije con una sonrisa.

-Un poco de potaje de garbanzos con carne y pan Challah- dijo feliz, ¡Genial! las sobras de la cena..

-está bien, suena delicioso- sonreí para no lastimarla

-después de la escuela prepararemos hamentaschen- eso si que sonaba delicioso

Mi madre salió de mi habitación cerrando la puerta detrás de ella, me cambié de ropa para bajar a desayunar con mis padres, me coloqué un vestido de color amarillo pastel con encaje blanco alrededor del cuello, me llegaba un poco mas abajo de las rodillas, un par de medias del tono de mi piel, por último me coloqué mis zapatillas de charol negro.

Busqué entre mi armario mi abrigo rojo favorito, estaba algo gastado por su uso, lo he tenido durante años, me senté frente al espejo de mi pequeño tocador de madera, cepillé mi cabello y lo até con un desgastado listón blanco.

¡Listo!

Bajé a desayunar tranquilamente con mi familia y luego fui a la escuela, estudio en el Liceo Judío, tengo dos amigos, sus nombres son Milk Ox Satan y Son Goku, Milk es judía polaca igual que yo y Goku es Judío Alemán, él se ha encargado de mostrarnos como funciona todo aquí, siempre estamos juntos los tres, no sé lo que haría sí nos separáramos, los quiero mucho, ellos se han ganado un lugar en mi corazón.

Las clases acabaron, íbamos de camino a nuestras bicicletas cuando un chico nos detuvo, era Yamcha, un chico de nuestro salón, un poco atractivo, lo único que hizo fue darme una carta y salir corriendo, Milk y yo nos reímos ante tal acción tan divertida y tierna.

La abrí.

En dicha carta  confesaba estar enamorado de mi desde que entré al Liceo, la verdad yo no estaba en busca de un romance, tal vez dentro de algunos años buscaría un chico con el que pudiera compartir mi vida y formar una familia, llena de amor y comprensión, pero por ahora no estaba lista para tener una relación.

-¿Qué harás?- preguntó Goku

-Creo que le escribiré una carta- respondí

-¿De amor?- dijo Milk sorprendida

-no- dije

-¿Entonces?- Goku me tomó de los hombros y me agitó levemente

- Le diré que no, puedo aceptar sus sentimientos y corresponderlos-

Guardé la carta en mi mochila.

De repente alarmas comenzaron a sonar, Goku nos abrazó para protegernos, temblaba del miedo, no sabía lo que estaba pasando, un avión pasó sobre nosotros arrojando hojas de papel con algo escrito en ellas, tomé una y la leí, sentí un hueco en mi pecho.

...Alemania ha invadido Polonia...