Hoy era un día importante en quiéreme mucho ya que era la celebración de los corazones dulces, el día que los ositos y ositas tenían la oportunidad de declarar su amor a ese osito o osita especial, un día que llenaba de alegría a los osos, pero, Fun...
Ya era de noche y Funshine se puso su típica gorra roja, reviso que su, a veces descuidado, pelaje rubio estuviera arreglado, por primera vez en la vida del oso amarillo se preocupaba por su aspecto y como no estarlo, si se iba a declarar a su osito especial, volvió a verse en el espejo pensando que tal vez debería cambiar un poco su estilo para dar una mejor impresión en la fiesta, se dio la vuelta y reviso su armario que por dentro toda su ropa estaba desorganizada, , Funshine miro cada prenda que tenía desde una camisa roja de botones hasta una chaqueta anaranjada con imágenes de soles, decepcionado de no encontrar algo que meramente lo hiciera luciese en la fiesta, Funshine cerró la puerta de su armario, se miró por última vez en el espejo para luego irse tal y como estaba.
En el camino Funshine contemplaba los bellos adornos que embellecía todo quiéreme mucho pensando en lo que le iba decir a Oopsy para expresar sus sentimientos de manera sincera y que no hubiera ningún tipo de mal entendido entre ellos dos. El oso amarillo se paró en frente de un árbol, se agacho y empezó a hacer un hueco en la tierra o mejor dicho a buscar "algo" que estaba enterrado en la tierra, posteriormente de un buen rato saco del suelo una pequeña caja color naranja, limpio la suciedad que había en esta y la guardo debajo de su gorra.
-Funshine- Dijo Cheer.
-Oh, hola Cheer, nos vemos en la fiesta- Dijo Funshine de manera neutral para luego irse.
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-¡FUNSHINE ESPERA!- Dijo Cheer sorprendida- ¿Qué habrá sacado de ahí?- Mirando el hueco.
Un exquisito olor no tardó en llegar a la nariz de Funshine indicándole que ya estaba cerca de la fiesta. Todos los osos bailaban, hablaban o comían tranquilamente, el oso rubio buscaba con la mirada al oso verde.
-¿Oopsy no vendrá?- Se preguntó el rubio.
-Hola Funshine que extraño verte por aquí-
-Hola Lucky, lo mismo digo de ti- Dijo Funshine sonriendo.
- Bueno como vinieron todos aquí, a declararse a su osito u osita especial y su tú estás aquí, no es exactamente para comer los deliciosos pies- Dijo Lucky con una sonrisa pícara.
-Sí, lo admito tengo a alguien especial y estoy nervioso- Dijo Funshine mientras movía un poco su gorra.
-Tranquilo, ella aceptara, confía en mí- Dijo Lucky mientras colocaba su brazo en los hombros del rubio.
-Si... Y eso es lo que me preocupa- Susurro Funshine.
-¿Dijiste algo?- Dijo Lucky
-No, nada, nada- Dijo Funshine con una sonrisa falsa.
Pasaba el tiempo y más gente venía a la celebración, Funshine tomaba un jugo de moras, movió su gorra un poco para distraerse de sus malos pensamientos, dio un último sorbo de su bebida y se fue de la fiesta a caminar un poco, desanimado paso por el parque de quiéreme mucho, Funshine le daba igual, lo oscuro o tétrico que se veía, su pelaje se erizo al oír el llanto de alguien, miro por todos lados hasta que sus ojos se fijaron de un oso sentado en uno de los bancos.
-¿Hola?- Pregunto Funshine aun asustado.
-Vete por favor-
-Oopsy ¿Qué haces aquí?-
Funshine fue a donde el oso verde para sentarse a su lado.
-Eso mismo digo de ti- Se seca las lágrimas-¿Qué haces aquí?- Dijo Oopsy mirando a Funshine con ojos llorosos.
-Eso no importa ¿Qué te paso?- Dijo Funshine mientras le secaba las lágrimas a el osito.
Oopsy no dijo nada solo miraba abajo, Funshine noto que al lado del oso verde había una caja de chocolates en forma de corazón, el rubio se dio cuenta lo que le pasaba a Oopsy, fue rechazado.
-Amigo... Ven- Funshine extienden sus brazos.
-Yo...- Oopsy se acurruca en el pecho del oso amarillo.
-Duele...Sabias...Duele...- Oopsy abraza a funshine- Que te rechacen-
-Lose...- El oso amarillo movió su gorra- No sé si sea lo correcto-
-¿Pasa algo?- Dijo Oopsy separándose del rubio aun con los ojos llorosos para ver a los ojos.
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-Yo...Tengo algo que decirte- Funshine toma un respiro- Recuerdo la primera vez qué te conocí Oopsy, eras un osito bastante particular, no solo por tu falta de insignia, sino también por tu manera de ser, si alguien me preguntara quién es el oso que mejor nos representa, diría que tú y solo tú, me disculpo si alguna vez te lastime, si alguna vez me reí de ti, si no te preste atención o si llegue hacer grosero contigo, realmente lo lamento- Saca de su gorro la caja anaranjada- Esto es para ti-
-No...No sé qué decir- Oopsy toma el regalo.
El osito verde abrió el pequeño regalo, era una pulsera con cuencas de colores y estrellas.
-La hice para ti- Funshine toma la pulsera y se la pone a Oopsy- Yo fui quien te dio esa carta...Yo soy tu fan secreto...Yo quiero ser tu osito especial-
Los ojos de Oopsy se abrieron como platos al oir eso.
-Funshine...Claro que puedes ser mi osito especial- Lo abraza.
-Oopsy- Dice Funshine feliz.
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Los dos osos se dieron un pequeño y tierno beso, los dos osos caminaron de vuelta a sus hogares tomados de la mano, antes de despedirse, Oopsy quiso quedarse a dormir en la casa del rubio, Funshine sonrojado lo piensa un poco y al final acepta. Los dos osos a penas entraron se fueron a dormir acurrucados uno del otro.
