¿Qué quieres de mi?

Déjame sola

06 de octubre del 2012

Samantha POV

Habían pasado 3 días desde que no hablaba con Jack. No había llamado, o enviado un mensaje. Estaba pensando en llamarlo yo, pero la última vez que hablamos me dijo que él me llamaría y no quería molestarlo, posiblemente estaba ocupado y tampoco es que me importe tanto hablar con él...

Hasta que sonó mi celular. Lo había dejado en la cocina, y entonces salí del cuarto corriendo, salté las escaleras, empujé a mi mamá, tropezé con mi gato, "cálmate Samantha, cálmate"... cogí el celular y contesté. Tal vez si me importaba.

- ¿Aló? - "Cálmate Samantha, cálmate" me repetía yo misma en la mente

- Hola, ¿qué haces? -

... Era Daniel... decepcionando mi vida de nuevo

- Oh, eras tú... - dije honestamente decepcionada

- Si, soy yo... Es un gusto hablar contigo también -

me reí - Lo siento, lo dije sin querer y nada, solo estoy... nada, no estoy haciendo nada, ¿tú? - dije mientras subía las escaleras y le mandaba un besado volado a mi madre por el empujón

- Igual, ¿puedo ir a tu casa?

-¿Ahora?-

-Si, podemos pedir comida y rentar una película-

- No sé... es que no tengo mucho dinero ahora -

- No te preocupes, yo pago -

- ¿Tú vas a pagar por mi? -

- Siempre pago por ti, señorita -

- No discutiré eso -

Él tenía razón. Él era bueno conmigo, si ibamos a algún lado y él compraba algo, me compraba lo mismo a mi o si me gustaba tal cosa o tenía hambre... "yo te lo compro, Sam", a mi ya me daba pena salir con él.

-Entonces, ¿puedo ir?-

-¿Es una cita?- dije bromeando

Escuché una pequeña risa de su parte -Lo que tu quieras ¿te veo en 20 minutos?-

-Te veo en 20 minutos- colgué el teléfono y me metí a mi cuarto para buscar que ponerme

Yo soy una problemática con la ropa.

No soy la persona más sociable del mundo y siento que puedo expresarme con la ropa y 20 minutos para escoger que ponerme... le habría dicho una hora, pero ya es muy tarde para eso... Quiero aclarar que no me pongo así por Daniel. La visita de cualquier persona es excusa para mi para poder vestirme bien. Podría venir el vago de mi vecindario e igual me preocuparía en que ponerme.

Luego de batallar y descomodar todo mi armario, me puse un vestido floreado, un cardigan negro y unas creepers. Me peiné y acomodé la ropa que había dejado en el suelo. Revisé mi celular por última vez, no había nada, lo apagué y lo dejé en una mesita a lado de mi cama. A Daniel no le gusta que use el celular cuando estoy con él, dice que es irrespetuoso y yo respeto su decisión.

Daniel llegó 20 minutos tarde, le iba a reclamar pero cuando le abrí la puerta, se fue corriendo hasta mi cuarto, ni siquiera me saludó, solo corrió. Cerré la puerta y lo seguí, estaba a punto de tratar de reclamarle de nuevo, pero noté que llegó con pizza y el dvd de "destino final 3". Ya había visto las 2 anteriores así que me alegró que trajera esa. Lo que no me alegró fue ver su ojo morado debido a un claro golpe.

- ¿Qué te pasó? - dije tratando de sonar tranquila pero no creo que lo hice muy bien

- Nada - dijo apenas mirándome -Traje pizza hawaiana, es la que te gusta, ¿no?-