Prólogo

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Tu POV

"T/N, la verdad es que no esperaba nada de ti"

Esas fueron las últimas palabras que me dijeron. Todos me dieron la espalda y simplemente me dejaron de lado.

Me dejaron las alas hechas un desastre. Me arrancaron las plumas, incluso me rompieron un ala para que no pudiera hacer nada, y sin ningún remordimiento me echaron. Y yo aún sigo sin creerlo...

Desterrada... desterrada del cielo. ¿Qué pensaría Azazel si lo supiera?

Nunca debí haberme acostado con la general... ¡Nunca debería haber pecado! Me siento profundamente arrepentida pero...

Hay una parte... una parte de mí que no siente lo mismo... ¿Estoy perdiendo la cabeza? ¿La lujuria se está apoderando de mí?

Fue un alivio que Azazel no estuviera ahí, se fue al infierno a recopilar información de los demonios para su investigación.

Afortunadamente cuando caí y me estampé contra el suelo de un descampado, en las cercanías de la ciudad. Me quedé inconsciente casi al instante y cuando desperté, estaba en un sofá con un chico delante, Arzur.

No confiaba en él al principio, pero al final me di cuenta de que es un buen chico. Me ayudó a curar mis alas, que todavía se están recuperando, me dio un sitio en el que vivir, me compró ropa nueva, me cuidó y me enseñó bastantes cosas de este mundo.

Básicamente le debo mi vida.

Pero no todo es color de rosas, en cuanto Dios se de cuenta que yo no estoy en el infierno mandara una horda de ángeles a, probablemente, matarme.

Después de todo nunca fui una de sus favoritas.

𝓔𝓼𝓽𝓮 𝓝𝓸 𝓔𝓼 𝓤𝓷 𝓜𝓾𝓷𝓭𝓸 𝓟𝓪𝓻𝓪 Á𝓷𝓰𝓮𝓵𝓮𝓼 𝓒𝓸𝓶𝓸 𝓣úDonde viven las historias. Descúbrelo ahora