Se encontraba en un espacio totalmente oscuro, no podía distinguir nada alrededor, se sentía como si flotara en la nada, pero pronto frente a el se vio a un hombre, era alto tenía cabello negro corto pero lo que mas le llamaba su atención era sus ojos negros y profundos
-Kakashi- susurro el hombre de una forma triste, pero sobre todo como si extrañara o anhelara a esa persona.
Abrió los ojos de repente y vio que se encontraba en su habitación, en su departamento y que ya era día pues los rayos de sol entraban con fuerza por su ventana.
Puso una mano sobre sus ojos para retirar lo ultimo que quedaba del sueño, suspiro y vio el reloj, noto que se le hacia tarde para reunirse con su equipo para entrenar, eso no le preocupaba ya que era normal que de vez en cuando llegara con un par de horas de retraso, lo que realmente le estaba causando preocupación en ese momento era que esta vez su sueño fue mucho mas realista que otras veces.
Volvió a suspirar, ese sueño lo lleva teniendo desde hace un año, siempre era lo mismo, una persona diciendo su nombre de una manera que hacía que su corazón sintiera un vacío, como si le faltara algo, pero esta vez el sueño fue mucho más fuerte, sintió como si esa persona de verdad estuviera frente el, que si se acercaba lo suficiente podría tocarla.
Se levanto de su cama y se alisto intentando olvidar el sueño, una vez listo se paro frente al espejo y verifico que su mascara se encontrara en su lugar, se pasó la mano por su cabello plateado y salió de su departamento directo al campo de entrenamiento.
..........
Mientras se iba acercando al campo de entrenamiento pudo distinguir a 3 personas que al parecer llevaban esperando un buen rato.
-Yo- dijo mientras levantaba una mano en forma de saludo.
- ¡Llega tarde! – gritaron dos chicos de 15 años, uno de cabello rubio y otra chica de cabello rosa mientras atrás de ellos un pelinegro ignoraba todo con la vista dirigida hacia otro lado, pero se notaba de alguna manera que estaba igual de molesto.
-Lo siento, es que me perdí por el sendero de la vida- dijo de manera perezosa mientras mantenía sus manos en los bolsillos del pantalón.
-Kakashi-sensei, si llega tarde no tendremos suficiente tiempo para entrenar las técnicas de equipo- dijo el rubio con un puchero.
-Que molestia, en vez de estar perdiendo el tiempo esperando podría dedicar ese tiempo para entrenar con Itachi- dijo el pelinegro
-Naruto tiene razón sensei, todos tenemos entrenamiento personal después y necesitamos mejorar nuestra dinámica de equipo- dijo la chica de cabello rosa mientras los otros dos asintieron para apoyarla.
-Maa... tranquilos chicos, podemos empezar el entrenamiento sin ningún problema- en ese momento se escuchó un grito por todo el campo de entrenamiento causando que los tres personas se molestaran ya que su entrenamiento seguía siendo interrumpido mientras que la cuarta suspiraba previniendo lo que se avecinaba.
- ¡RIVAL! – grito un hombre vestido totalmente de verde y con un corte tazón.
-Hola Gai- dijo de forma desganada.
-Kakashi vengo hoy a retarte a una carrera para por fin desempatar- dijo Gai mientras daba una sonrisa demasiado brillante.
-Lo siento Gai, pero hoy tengo entrenamiento y no puedo posponerlo- al escuchar eso Gai puso un gran pulgar frente la cara de Kakashi.
-Tus llamas de la juventud arden fuertemente Kakashi, le estas mostrando un gran camino a tus alumnos- Kakashi solo podía suspirar por toda la energía que soltaba su amigo.
