𝐈𝐑𝐈𝐍𝐀 || peter parker

▬▬▬▬▬𝐩𝐫𝐨́𝐥𝐨𝐠𝐨

23 de julio del 2006

         UNA JOVEN IRINA DE CINCO AÑOS estaba escondida detrás un arbusto tratando de esconderse de la mujer que ha logrado que su respiración este tan acelerada que tiene miedo de que la pueda escuchar.

Tiene sus sentidos a flor de piel, y siente como su pulso se acelera de una manera poco saludable. Levanta la cabeza tratando de encontrar a la mujer de la que se ha estado escondiendo, la busca por todos lados pero no da con ella, cuando se siente segura trata de comunicarse con su hermano, pero justo cuando está por poder enviara tan si quiera una palabra por el mensaje siente cómo la levantan y la pegan contra el pecho de la otra persona.

—¡Te encontré, pequeña!- grito felizmente la mujer-. Ahora sí te gane.

—¡Tía! ¡No es justo!- la niña hace un intento porque su tía la suelte, se mueve como gusanito y lo único que provocó es su caída al suelo y una carcajada de parte de la mujer-. Eso no da risa, nada de risa.

—Lucecita, sabes que sí da risa. Pero por respeto ya no me voy a reír.

Irina vio seriamente a su tía la cual correspondió la mirada, era una guerra de miradas aún que las dos sabían que por dentro se estaban muriendo de la risa.

—¡Irina! ¡Tía!- se escucha el grito de un joven Liam, Irina y su tía voltean a ver por dónde provienen los gritos-. ¡Irina! ¡¿Dónde rayos están?! No puede ser, me dejaron esperando la llam... ¡Auch! Ah me caí ¡Pero estoy bien! ¡No pasa nada! Sigo vivo.

La mujer mayor corre seguida de la niña a revisar al pequeño, cuando lo encuentra está sentado en el suelo, Wendy se pone en cuclillas verificando que el pequeño esté bien, para después comenzar a reírse al punto de caerse de espaldas en el suelo.

Los pequeños Summers se voltean a ver confundidos por la actitud de su tía, pero no les duró mucho la confusión ya que se empezaron a reír ellos también gracias a la risa de la mujer.

Su madre les solía decir que su tía era de esas personas que tienen una risa que aún en el peor momento te puede hacer reír y no mentía, ahora los pequeños no podían respirar del todo bien gracias a las risas.

Cuando Wendy se calmo, vió a los dos pequeños esperando a que ellos también dejarán de reírse para poder hablar.

—Saben que las cosas son así, primero voy a confirmar que estén bien y después me puedo reír— les dijo con una voz suave pero divertida—. Los amo y lo saben pero también es bueno reírse de vez en cuando

Los tres se sentaron en el suelo sin decir nada, era un silencio cómodo, Irina se sentía feliz junto a su hermano y su tía.

Su tía siempre fue como su segunda madre, junto a Liam y Alexa eran una pequeña pandilla y obviamente su tía siempre los cubría y salvaba de los regaños de su madre, pero después de todo ella también los podía regañar pero no duraba casi nada el regaño debido a su amor por los tres pequeños.