capítulo 4

82 10 0
                                    

Los iris esmeralda se habían apoderado de un grupo diverso. La roseta había bostezado, dado que era bastante temprano en la mañana. Ella sonrió, viendo a sus chicos dormir como niños en su el pequeño cuarto de alquiler que atentaron durante la misión.

Si hubieran estado despiertos, habrían visto su expresión serena. Dedos ágiles cubrieron un rostro bronceado ligeramente cicatrizado. Recorrió las cicatrices en forma de bigotes, sonriendo cuando escuchó un leve ronroneo. Miró a otro hombre, su piel pálida brillando a la tenue luz de la luna. Su cabello negro aún desafiaba la gravedad a pesar de que estaba pegado a una almohada.

Un suspiro de contenido escapó de sus labios, mientras miraba alrededor de la habitación, sus ojos se fijaban en algunos peinados interesantes y extraños tatuajes. Tumbado graciosamente en su sofá había un hombre hermoso. Su cabello largo envuelto en un moño. Su rostro generalmente duro y estoico parecía tranquilo, incluso pacífico.

Debajo de la mesa, un joven con un peinado bastante inusual dormía profundamente. Una sonrisa adornó sus labios. Ese hombre puede dormir en cualquier lugar, ¿no? La joven bromeó para sí misma, acercándose a una silla y colocando su trasero sobre ella. Sus ojos brillaron intensamente mirando a sus chicos. Casi gritó cuando vio a Kiba abrazando a su adorable perro. Ella podría quedarse así para siempre ...

En medio de sus pensamientos, Sakura sintió ese familiar cosquilleo en la nariz. Abrió mucho los ojos, esperando que esto fuera una falsa alarma. Desafortunadamente para ella, era temporada de alergias y un poderoso estornudo resonó en toda su casa. Tímidamente rascándose la nuca, rezó para que nadie escuchara eso.

Después de un tiempo sin que nadie se moviera mientras dormían, consideró seguro seguir observando a sus camaradas. Es decir, hasta que escuchó una voz ronca.

"Sabes que es de mala educación ver a la gente dormir, ¿verdad, Sakura-san?" Fue más una declaración que una pregunta. Unos pocos gemidos de acuerdo indicaron que todos estaban despiertos y conscientes de su mirada.

Su rostro se parecía a su cabello, jugando con sus dedos, murmuró una disculpa. Lo que obtuvo a cambio fueron sonrisas cansadas y una invitación a dormir entre Naruto y Sasuke. Con una sonrisa y un sonrojo, aceptó.

(Esa 1ra parte pertenece a Xeneric -saque y agregue cosas mias-, gente busquen fanficfiction en Google que gracias a los fanficfiction me convertí en una amante de la lectura. Ahora sigo.)

Su respiración comenzó a volverse pesada, cosa que comenzó a alertar al grupo.

- Estas bien Sakura-chan?.- pregunto un Naruto que se desveló de su sueño.

- No..- dijo jadeando.

Un rápido Lee, fue abrir la puerta del pequeño lugar donde se encontraban por la misión, dejando así que las cazadoras de almas entrarán y se acercarán directamente a su ama. El sueño se había acabado, lo único que podían apreciar el grupo Acero de Konoha era como las almas robada entraban a una semi-inconsciente pelirosa.

- Estas mejor?.- pregunta Shino.

- Si.. Yo lo siento, los termine despertando y seguro están cansados.- dijo avergonzada, ella no dormía lo que provocaba que tuviera una envidia sana a su sueño.

- No te preocupes.. Vamos a dormir.- dijo Shikamaru.

Sakura se acomodó esta vez en medio de Suitgotsu y Juugo, mientras el resto volvía a dormir tranquilamente.


(2 días después)


Se podía ver como el grupo se dirigía a la torre hokague con un niño de tres años, azabache con ojos de distintos colores.

- OBA-CHAAN!!!.- grito un rubio imperactivo.

- NO ME LLAMES ASÍ NARUTO!.- dijo una molesta Tsunade, mientras esperaba a que los grupos entrarán.

- Por qué nos llamó Tsunase-sama?.-pregunto Shikamaru con las manos en la cabeza.

Sasuke se acercó para entregarle el reporte, para ir a la izquierda de la oficina hokague.

- Ella es Shion, la sacerdotisa que trajeron hace una semana, antes de partir.- señaló a la rubia.- Por el momento va necesitar hospedaje en su casa junto a los guardianes que trajo.

(...)



- Mi nombre es Shion del país de los demonios, y soy la máxima sacerdotisa de mi país,  les agradezco por salvarme hace una semana de esa mujer pelirroja.

- No fue nada.- contesto Naruto.- espero les guste nuestra bella morada.- le hablaba mientras caminaban con las manos en la cabeza.


Los grupos estaban en silencio mientras seguían desde atrás a los tres extranjeros.


Una vez en su “casa", los tres visitantes se asombraron por lo grande que era.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-	Bueno que les parece si nos presentamos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




- Bueno que les parece si nos presentamos.- dijo Lee.- Yo soy Rock lee, pero pueden decirme Lee.- término con una gran sonrisa brillante, asustando al moreno que estaba cerca de Shion.

- Yo soy Naruto.- dijo el rubio imperativo, así fueron presentándose los grupos hasta que llegó el turno de la rosadita.


- Yo soy Sakura Haruno.- le dijo sonriendo.- Espero nos llevemos bien en este tiempo que van a convivir con nosotros, el es Sora-kun.- precento.

- Es tu hermanito Sasuke-kun.- le preguntó sonriendo al moreno.


Todos se dieron cuenta de sus intenciones, haciéndoles resoplar pesado.

- No es nuestro hermano.- dijo serio.- Es nuestro hijo mayor, durmiendo esta la bebé.

La rubia miraba a los hombres en la sala, hasta que su mirada paró en la única chica en el cuarto.

- Qué se siente llevar un bebé en el vientre?.- pregunto sonriendo, sin darse cuenta de lo que esas palabras provocan.- Me imagino que es maravilloso.

- Lo es.- dijo sonriendo forzosa/ironicamente.- es hermoso, sus habitaciones están al fondo del pasillo, no tienen letrero, pueden elegir cuál usar, la cena estará media hora.


Los tres agradecieron, mientras que la rubia y el moreno se iba, el colorado miraba a la pelirosa, dejando un tenso ambiente.


- No se que eres.- le dijo Drago.- pero tu olor a sangre de demonio es fuertísimo.- al decir eso se fue.

- Tks.. estúpidos.- dijo Hidan. – Esa perra rubia es una entrometida.


- Tranquilo Hidan-kun…-dijo calmandolo.- Sora, ve con papi Neji a cambiarte.- le hablo al niño, que chupaba su dedo.

Unos pasos se pudieron escuchar bajar.


- Una rubia entro al cuarto de la bebé y casi la despierta.- dice Konan, viniendo con el resto del grupo femenino.- suerte que estábamos ahí.

- Se abra equivocado de cuarto, vamos a preparar la cena girls.

- ustedes se bañan.- los señala Ino con las manos en las caderas.- ahora.

- Problemática.


Las chicas se perdieron en la cocina, cuchicheando algunas cosas mientras un chico se llevaba a un niño a bañar, y los demás iban hacer lo mismo.












Cherry Blood (S.H) HaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora