-Aceptemoslo, tú nunca me amaras ni la mitad de lo que yo te amo, ni aunque tenga tanto amor incluso para darte, y que de esa forma tú me amaras a mi, y ¿sabes?, aunque eso pasara, aún me sobraría suficiente amor como para seguir amandote.
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Amor.
Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
Amor.
Sentimiento hacía otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.
Realmente, ¿Qué carajos era el amor y cómo demonios es que dolía tanto?; durante toda su vida había experimentado la "diversidad" del amor, porque si, de una forma bastante graciosa este estaba presente en todas las etapas de su vida, y es solo que el amor se expresaba de tantas formas, el amor familiar, el amor entre amigos, el amor a las mascotas, el amor propio, y por supuesto el amor de pareja entre muchos otros más.
Pero vaya que uno lo había engañado como nada en su vida, él ahora sabía que el amor era un arma de doble filo, y vaya que lo había aprendido a la mala. El amor simplemente te enredaba, te ilusionaba al punto de hacerte subir al cielo, para que al final de dejara caer a un obscuro y frío vacío.
Obito podía sentir como la taza de té entre sus manos empezaba a emanar su calor haciendo que la temperatura de sus 2 extremidades empezará a aumentar, él día hoy parecía estar sincronizado con su estado mental, ya que aunque graciosamente era primavera, ese día estaba nublado y el viento estaba tan fuerte que podía notar por la ventana como que este movia las ramas verdes de los árboles.
No sabía que demonios iba a hacer cuando llegará Kakashi, no sabía si tendría el valor suficiente para poder expresar lo que desde hace unas dos semanas pensaba y sentía sobre su relación. Soltó un suspiro, sintiendo como es que por un momento su cuerpo se relajaba. Tan solo esperaba que su intento no fracasará como el de hace unos días.
FlashBack.
El lugar se sentía más que tenso, el ambiente ya no era ameno, ninguno de los dos comentaba nada, tan solo se escuchaba el sonido de los cubiertos al chocar contra sus platos.
Él sabía que tenía que hacerlo.
-Kakashi- el nombrado volteo a ver a el pelinegro -Me gustaría hablar contigo sobre algo que creo que es muy importante para los dos.- ya esta, lo había soltado, era momento de decirlo todo.
-Obito, claro...- vaya suerte que tenía, el celular de Kakashi había empezado a sonar en el peor o ¿mejor? momento.
Kakashi respondió el celular y fruncido el ceño al escuchar las voces a través del dispositivo -Claro, entiendo, dame un momento- con su mano derecha tomo el celular y lo bajo tapando la bocina -Obito, tan solo déjame terminar esta llamada y seguimos conversando.
