El poder de los sueños

Los sueños, los sueños nos dejan ver, escuchar, sentir… saber que hay en nuestra mente. Cuando caemos en un sueño profundo ya no somos los titiriteros de nuestra mente. Ahora es ella quien nos muestra una película,  en la que a veces nos encanta ser el protagonista, pero también hay momentos en los que nos gustaría cerrarla bajo llave, y que esta no volviera a verse jamás.

Cuando un sueño es acogedor, ordenado, agradable,... cuando sentimientos como la tranquilidad, el amor, la amistad, la alegría empiezan a correr por tus venas, disfruta porque estás en uno de tus sueños,  escenas de los lugares en los que desearías estar, están siendo reproducidas por tu mente. Cuando sueñas, conversaciones para las que tienes cientas de respuestas para cada palabra pronunciada, comienzan a sonar, como si de una suave melodía se tratara. Los sueños pueden convertirse en nuestra propia máquina del tiempo, donde podemos recordar todos los momentos que nos han aportado felicidad o también puede transformarse en una puerta a "nuestro mundo perfecto".

Los sueños nos aportan felicidad, pero como en los cuentos para niños y no tan niños, existe un antagonista, la pesadilla. Las pesadillas nos hacen comprender nuestro miedo, aunque nuestra cabeza se niege a aceptarlo. Entran sin invitación e interrumpen nuestro sueño, obligándonos a despertar. Dicen que cuando en tu sueño entra una pesadilla es porque has dejado de respirar o estás teniendo un mini infarto y por eso te impulsan a abrir los ojos y recuperar el aliento. Por experiencia propia, solo tengo pesadillas cuando algo me preocupa ya sea desde la salud de una persona a la que quiero hasta el estrés por un examen. 

En conclusión el poder de los sueños, es inmenso. Los sueños pueden traernos felicidad, alegría, ilusión... Los sueños pueden hacernos viajar a lugares que nunca habíamos pensado, pero sobretodas las cosas los sueños son sabios. Los sueños son sabios porque nos muestran todo lo que queremos ver y todo lo que no nos apetece tanto. Son los guías en nuestro camino. Los sueños tienen el maravilloso poder de la sabiduría.