CAPÍTULO 5

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•Narro┊

— Mami... ¿Cuánto le falta para irnos a casa?

— Poco baby, ven, siéntate en mis piernas. –palmoteo sus muslos.

El baby se acomoda sobre sus piernas de costado, con una ligera incomodidad porque la puerta de la oficina no está cerrada y en cualquier momento alguien podría entrar.

Aun con más de un mes, la actividad sexual entre ambos no había pasado a más que simples toques subidos de tono.

Cosa que ponía a Yoongi en una situación extraña, pues queria, inconscientemente llegar a más y se preguntaba porque la mayor no pasaba de eso, siendo una especie de duda interna que ignoraba diciéndose que era mejor así.

Aunque también la mayor solo estaba midiendo sus acciones, porque ganas no le faltaban.

El baby posicionó su rostro más cerca del cuello de su mommy, le gustaba el perfume que la mayor usaba y también lo utilizaba como pretexto para poder rozar con sus labios esa parte expuesta de piel.

— Baby...

— ¿Uhm?

— Kihyun... ¿Vendrá hoy también?

¿Porqué sintió raro que le preguntará sobre su amigo?

— No se mommy... no me a escrito nada.

La tristeza abarcaba lentamente el corazón de Yoongi porque por un lado también quería que la mayor pasará de los toques, que no le hubiera preguntado por su amigo y demás, porque en el fondo era inseguro y celoso, más cuando se trataba de __, su mommy.

Su corazón latió tan rápido tantas veces en menos de un mes al lado de la mayor.

— Mommy...

Yoongi susurro, sus labios iniciaron a repartir besos en el cuello de la mayor.

— Bebito...

Lentamente lo aparta y trata de que la vea a los ojos, pero solo se mantenía con la cabeza agachada todo rojito y a centímetros de su rostro.

— Te prometí que sería especial mi amor.

El corazón de Yoongi brinco al escuchar decirle "mi amor".

— ¿Bebito...? –el solo asintió.

Ella sabía a que se debía ese comportamiento, ya había ocurrido esto dos veces antes.

Así que lo cogió del mentón y hizo que la mire, beso sus labios lentamente y se separó, dejando antes un beso en su mejilla y continuó con su trabajo.


⟦◦◦◦⟧


— ¿Qué se te gustaría pedir?

— ¿Puede ser lasaña Noona?

— Esta bien. –llama al mesero.

— ¿Cuál es su pedido?

— Una jarra de limonada y para los dos, lasaña.

— ¿Desea algún postre?

— Sí, dame Éclair... ¿Deseas algún postre mi amor? –el menor trato de disimular su leve sonrojo.

— Ehh... ¿Mi-lle-feu-ille...? –el baby trato de pronunciarlo lo mejor que pudo, aunque avergonzado concluyó.

— Es Millefeuille corazón. –la mayor río sutilmente, le pareció tierno la forma en la que intentó decir el nombre del postre en francés– También traiga eso...

❐ Mᴏᴍᴍʏ, ɪ ᴡᴀɴᴛ ᴛʀᴜᴇ ʟᴏᴠᴇ •『ʏᴏᴏɴɢɪ & __』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora