Disfraces

Narrador omnisciente.

En una ciudad llamada Konoha, ya llegaba el 31 de octubre y todos sabían lo que significaba : disfraces, dulces, trucos y risas de los pequeños que iban a divertirse por la noche. Pero eso nunca fue así para Neji Hyūga, a él nunca lo dejaban salir a pedir dulces, pues lo consideraban inferior, y su tío, Hiashi, le hacía la vida imposible.

-Pero, Hiashi-sama...

-YA TE DIJE QUE NO IRÁS!!!

-Pero, Hiashi-sama, deme por favor una buena razón para que no me deje ir.

-PORQUE NO TE LO MERECES!!! Sólo mírate, tan patético, no puedes hacer nada por ti mismo, si no fuera por mí estarías en la calle.

Neji apretó los puños, él tenía tan sólo 10 años, quería ir a jugar en Halloween, como veía que los demás lo hacían.

-Pero...

-UNA SOLA PALABRA MÁS, Y ME ASEGURARÉ DE QUE NO VUELVAS A CONTRADECIRME, ESCORIA!!!

-Sí, Hiashi-sama...

Neji fue corriendo a su habitación, estaba cansado, desde que murió su padre hace 3 años, vivía en esa casa llena de desesperación y desprecio.

De repente, tuvo una idea, a él se le consideraba un genio, siempre se las arreglaba para alcanzar sus objetivos : Y si...él se escapaba? Sería sólo por ésta noche, volvería antes de que Hiashi lo descubriera, ¿no?

Pero...ni siquiera tengo un disfraz-pensó

Estuvo pensándolo 15 minutos, planeando lo que iba a hacer, analizando todas sus rutas de escape y de regreso, y la hora a la que debía volver, aunque no tuviera un disfraz, estaba decidido a ir a divertirse.

Luego de esos 15 minutos, se decidió, saldría por la ventana de su cuarto, bajaría a la calle y luego volvería por la ventana trasera, que da al cuarto de Hinata para ir a su cuarto nuevamente.

Neji se alistó y salió por la ventana, diablos, era una caída considerable, dado que su cuarto estaba en el segundo piso de la casa, pero todo era por su primer Halloween, así que se lanzó y aterrizó en el suelo.

Al ver la ciudad de noche, tan luminosa, Neji se sorprendió, todos los niños jugaban, reían y comían dulces, ¿así que éste era Halloween? Porque era hermoso.

Caminando por las calles, pensaba, ¿cómo haré para conseguir dulces? No tengo un disfraz.

Pero bueno, valía la pena salir y socializar un poco con niños de su edad, ya que Hiashi no se lo permitía.

Pensando, chocó con un grupo de niños que no conocía, chocando especialmente con una niña vestida de fantasma, que le dio miedo.

-Auch! ¿Qué pasó?

-Naruto, ve mejor tu camino- dijo el otro niño

-Oh, lo siento, ¿te ayudo?- dijo la niña vestida de fantasma.

Neji aceptó su ayuda y se levantó, se disculpó y ya iba a irse cuando...

-Ey, ¿porqué no vienes con nosotros 'ttebayo? Veo que estás solo, no es muy agradable estar solo.

-Eh? Gracias...

-Bien, sigamos con nuestra ruta de dulces!!!

Se presentaron todos ante Neji, la niña vestida de fantasma se llamaba Tenten, el niño vestido de pirata se llamaba Naruto, el que estaba vestido de calabaza se llamaba Shikamaru, y la niña vestida de hada se llamaba Sakura.

Llegados a un punto, se sentaron en una banca.

-Bien, ¡cuéntale a Neji el plan, Shikamaru!

-Bien- al decir ésto, Shikamaru sacó un mapa, que tenía registradas todas las casas del pueblo.