Wei Wu Xian se encontraba desnudo, de pie frente a un gran y largo espejo.
- Tu padre y yo te esperamos con ansias conejito. - dijo Wei Ying
La puerta del cuarto se abrió y Wei Ying corrió a buscar ropa o algo para cubrirse, su vientre estaba más abultado y temía que Lan Zhan ya no lo deseara.
- ¿ocurre algo? - preguntó Lan Zhan entrando al cuarto
- No no, nada - dijo avergonzado Wei Ying
- ¿Por qué corres? - preguntó Lan Zhan preocupado
- Es sólo que me asustaste Lan Zhan, ahora salgo - dijo Wei Ying con un tono dulce
- Mhm - asintió Lan Zhan
Ambos cenaron y vieron películas hasta que Wei Ying se quedó dormido en el sillón. Lan Zhan comenzó a acariciar los cabellos de Wei Ying mientras este descansaba sobre su regazo.
- Amor, eres hermosos... - los ojos de Lan Zhan brillaban en un hermoso dorado. Recostó su cabeza sobre su hombro y se quedó dormido.
A la mañana siguiente Wei Ying se despertó y vio a Lan Zhan durmiendo justo sobre el, Wei Ying sonrió dulcemente.
- Esposo mío, siempre duermes incómodo por culpa mía... - Wei Ying no pudo terminar su idea, pues las náuseas lo llevaron al baño.
Lan Zhan no tardó ni 2 minutos en despertar al sentir su regazo vacío y fue en busca de Wei Ying, quien estaba en el suelo del baño abrazando el inodoro.
- Sal de aquí Lan Zhan... - dijo Wei Ying con la voz ronca
- No - dijo serio Lan Zhan
Wei Ying no pudo decir más nada pues su espalda se arqueo y comenzó a hacer esfuerzos por expulsar todo lo que había cenado, su esfuerzo fue en vano ya que en ningún momento salió nada, solo el esfuerzo por vomitar.
- Te prepararé algo ligero de desayunar - dijo Lan Zhan dando suaves giros en su espalda.
Sus mañanas se convirtieron en una rutina, él intentaba vomitar ante las náuseas y Lan Zhan preparaba dulces y nutritivos desayunos.
Una mañana, cuando Wei Ying ya tenía 5 meses, se encontraba solo en su casa y el movimiento dentro de su ser se hizo presente por primera vez.
- Oh, conejito, creo que serás tan energético como yo. - dijo acariciando su vientre
Al caer la noche esperó con ansias a Lan Zhan para contarle lo ocurrido, pero los minutos comenzaron a parecer eternos, algo malo debía haber pasado ya que él nunca se tardaba mucho.
El celular comenzó a vibrar en la cocina y Wei Ying corrió por el.
- ¿Bueno? - preguntó algo nervioso
- Hola, buenas noches, hablamos del hospital Wen... - su corazón se detuvo por un segundo y colocó su mano libre sobre su vientre. - ¿Es familiar del joven Lan Zhan? - esas palabras le helaron la sangre
- Si... - su voz salió ronca y sin ánimo
- Por favor venga lo antes posible, debemos hablar con usted ya que él joven tuvo un accidente.
Sin pensarlo 2 veces salió con rumbo al hospital. Llamó a su hermano
- A-Cheng, te necesito, por favor - su voz estaba llena de miedo y dolor
- ¿Dónde? - preguntó con una voz seria Jiang Cheng
- El hospital Wen... - su voz se oía trabada, las lágrimas habían comenzado a caer.
- Vamos en camino - dijo Jiang Cheng sin colgar el teléfono
- Lan Zhan... él se... A-Cheng... tengo miedo.
- Ya vamos saliendo, A-Xian respira, no es bueno para el bebé que te pongas mal.
Ambos se quedaron en silencio y llegaron al hospital, al salir de su auto Wei Ying corrió hasta la recepción y preguntó por Lan Zhan.
- Habitación 512
Corrió hacia el cuarto y cayó de rodillas ante lo que vio. Los fuertes brazos de su hermano lo rodearon y lo levantaron para darle un cálido abrazo, Wei Ying comenzó a llorar con fuerza, su pecho le dolía de una manera inexplicable.
- Joven Wei, no es bueno para el bebé que se ponga así - dijo Xichen suavemente
Los tres entraron a la habitación, Lan Zhan tenía de todo tipo de cables conectados a su pecho, un par de tubos en su nariz y suero en su brazo izquierdo.
La imagen era muy dolorosa para dos personas dentro de esa habitación, así que Jiang Cheng tuvo que armarse de fuerza y se dijo a sí mismo "cuidaré de este par hasta que despiertes Lan Zhan".
Dicho y hecho, durante los siguientes 4 meses Wei Ying se había mudado con él y con Xichen, Jiang Cheng había dejado a Jin Zixuan encargado en el trabajo durante ese tiempo.
Jiang Cheng se dedicó 24/7 a su hermano y a su esposo. Las ojeras en sus ojos eran ya muy marcadas y había bajado considerablemente de peso.
Llegó el tan esperado día, Wei Ying comenzó con contracciones en la mañana, pero no fue hasta la tarde que comenzó con la labor de parto, los 3 se fueron al hospital y tras 4 horas el llanto del bebé se hizo presente.
Era hermoso, su piel era suave, sus manos y pies eran diminutos, su nariz era perfecta y su salud era perfecta.
Después de 3 días Wei Ying pudo reunir a su hijo con su padre.
- Mira A-Yuan, él es tu papi, está durmiendo porque está muy cansado, pero pronto despertará para conocerte. - dijo Wei Ying mostrándole a su bebé a Lan Zhan, quien ya no tenía los tubos puesto que ya respiraba por sí mismo. - Si, solo necesita descansar - dijo algo desanimado Wei Ying
2 semanas más tarde el doctor le dijo a Wei Ying que Lan Zhan no podía seguir así, que si no despertaba en lo que quedaba del mes, lo mejor sería aplicar la eutanasia ya que su cuerpo estaba sufriendo demasiado.
Esa misma tarde Wei Ying fue a hablar con Lan Zhan para tomar una decisión.
- ¿Quieres volver? - preguntó Wei Ying con una voz rota. - A-Yuan te espera, pero si quieres ir y descansar, está bien yo te buscaré después - dijo llorando mientras tomaba entre sus manos la mano de Lan Zhan - De verdad me gustaría que lo veas, es hermoso y tiene tus ojos - dijo Wei Ying apretando con fuerza la mano de Lan Zhan.
- Mhm...
- Tu y tus "mhm's" para eso te... - Wei Ying se quedó helado - ¡MI LAN ZHAN! - gritó limpiando sus lágrimas
- Mi Wei Ying...
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ESPEJO
FanfictionLa tragedia está presente en todo momento de nuestra vida, no hay una señal que nos diga que algo malo va a ocurrir y aunque la hubiera, el daño no se tomaría el tiempo de tocar esta señal. De lo único que ambos estaban seguros era de su amor, más n...