Lee Know

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Pasaba por una calle tranquilamente y encontré a un gatito color gris, se miraba asustado. Detrás de un árbol salió un perro grande tome al gatito y trate de protejerlo, el perro mordió una de mis piernas alguien lo espanto y el perro se fue, caí con el gatito en mis brazos. Un chico llegó y me reviso.

- Ahh está sangrando.

Dijo viendo mi pierna.

- Permíteme llevarte a una clínica.

- Ahhh duele.

Aún tenía al gatito en mis brazos.

El chico tomo al gato y lo metió al carro, me tomo en brazos y me subió a su carro, me llevo a la clínica.
Al llegar me ayudó a bajar y entramos, no puede evitar llorar un poco, me atendieron, me pusieron una pomada y unas vendas y me dijeron que descansará una o dos semanas dependiendo como iba, me senté afuera ya que quería agradecerle al chico.
Llegó y se puso en cuclillas frente a mi.

- Muchas gracias, salvaste a mi gato, yo fui muy descuidado, si no estuvieras ese perro se lo hubiera comido, y lo siento por lo de tu pierna, si ocupas otra cosa dime.

- Yo también quería agradecerte por traerme aquí y pagar todo.

- Estaré en deuda contigo, salvaste a mi gato.

- Quieres mucho a tu gato.

- Lo amo con mi vida, por eso siempre estaré agradecido contigo, me puedes dar tu número.

Le di mi número.

- Te llevaré a casa.

- No te preocupes, tomo el bus y llegó.

- No, te llevaré yo, donde vives.

Le di mi dirección.

- Ah no te preocupes vivo cerca, porfavor déjame acompañarte.

- Está bien.

Me ayudó a llegar al auto y fuimos a casa, en el camino no me habló, yo solo jugaba con el pequeño gatito.

- Bien llegamos.

- Muchas gracias.

- Por cierto soy Minho.

- Gracias por todo Minho.

- Me dirás tú nombre.

- A si soy Hye.

- Gracias Hye.

- Deja de agradecer.

- Pero no puedo, salvaste a lo más preciado para mí.

- Bien sigue agradeciendo.
Reímos.

- Mañana vendré a ver cómo sigues.

- Esta bien, gracias Minho.

- Adiós.

Ya habían pasado dos semanas desde que pasó el accidente, Minho siempre me hacia compañía, nos hicimos grandes amigos. Estaba viendo la televisión, seguía en pijama ya que no esperaba visitas, mientras comía helado, sonó el timbre y me pare a abrir, en la puerta estaba Minho.

- Hola, ya no es necesario que vengas, ya estoy bien, de echo desde varios días atrás.

- Pero me acostumbré a verte y estar contigo.

- Creo que tienes razón, pasa.

Entro y se sentó en el sofá.

- Quieres helado.

- Solo un poco.

- Ya vengo.

Fui por un poco de helado y me senté a su lado.

- Quieres ver una película.

- Me encanta la idea.

- Bien.

Al acabar la película, Minho hizo que me acostara en su pecho.

- Gracias.

- Seguirás agradeciendome por lo de Dori.

- No solo por eso, gracias por llegar a mi vida, si no hubieras salvado a mi gato nunca te hubiera conocido.

- Ya no agradezcas.

- Pero lo quiero hacer.

En un movimiento rápido me beso, se sentía lindo y tierno, se separó y se sonrojo tiernamente.

- Lo siento si te..

Lo interrumpí y de nuevo lo bese.

Gracias a Dori conocí al amor de mi vida.

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Quieren que les haga un capítulo especial con su bias?

Me encantaría hacer historias pedidas por ustedes.

Hasta aquí este capítulo.

 

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