Fuzzy Way | Nomin [+18]

01. Lee Jeno

Durante su vida, nunca ha tenido la oportunidad de mezclarse entre tanta multitud de gente glamurosa y pretenciosa. Su carrera de modelaje y pasarela ha sido de lo más apaciguada posible, sin meterse en polémicas ni con personas incorrectas ni encontrarse en el lugar inadecuado. Pero, Lee Jeno sabía que esto algún día llegaría, no era un tonto después de todo y sabía que si aquello ocurría, iba a dar un cambio rotundo en su vida tanto laboral como personal, pero lo que no se esperaba era como este cambio fue anunciado, a través de una invitación inesperada.

— Tenemos una semana para preparanos, se trata del nuevo lanzaminto de Ferragamo.

El chico instantaneamente quedó en shock tras escuchar las palabras de su agente. Había sido seleccionado entre tantos concursantes aspirantes a quedar en alguno de los puestos. Tuvo un par de puestos relevantes dentro de la industria del modelaje pero ninguno se igualaba a este. Era su oportunidad de brillar y enseñar a la marca prestigiosa lo que tenía preparado y por demostrar, se sentía muy seguro de si mismo pero a la vez sabía que era el reto de su vida. La invitación alteraría todos sus sentidos durante esa semana.

Jeno no podía descansar ni un segundo, a pesar de tener su confianza al filo, no dejaba de revisar las redes sociales ni mucho menos la web de la marca. Tenía que salir todo perfecto, desde la caminata, como debía mover sus brazos y caderas a la hora de caminar, su postura tenía que ser tan recta como la de un ángulo de noventa grados. Cada vez que deslizaba su dedo en la pantalla de la tablet junto a su agente de modas, sentía cosquilleos por todo su cuerpo, inclusive no dejaba de mover su pierna, la ansiedad también se estaba haciendo presente.

— ¿Sabes que no se trata solamente de ir a presentar su nueva linea y ya, no?

— ¿A qué te refieres con eso?

Luego de estar un par de horas revisando y analizando los distintos videos de pasarelas anteriores, todo esto a pedido de Jeno, la incertidumbre y el miedo aparecieron. Él presentía que iba a morir sofocado de sentir tantas emociones y todas distintas a la vez, a pesar de tener una experiencia de unos cinco años, desde su adolescencia específicamente, no se había enfrentado a un escenario tan desconocido como el que le estaba narrando su agente. Desconocía completamente como tratar con personas adineradas, pudientes, con risas falsas, eso era lo que imaginaba, ni con personas con tantos intereses extravagantes y extraños, quizás la élite se manejaba de esas formas y de a poco debía entrarse a ese mundo. Pero, hubo unas palabras de aquella explicación tan extensa y detallada por su agente que lo hizo reaccionar y caer en cuenta.

— ... nunca debes demostrar que eres nuevo en esto...

¿Cómo él sería capaz de demostrarlo? Se preguntaba. Se estaba dando cuenta de que no solo necesitaba sus clases de practica diarias de modelaje, sino que también un apoyo psicológico para calmar su ansiedad e inestabilidad. Jeno juraba ser un chico con valor y hombría, uno que amaba los retos y enfrentarlos, pasarlos por alto como si no se tratara de uno, pero este caso fue todo lo contrario. Si tan solo Ferragamo no tuviera esa relevancia que tiene actualmente, nada de esto estaría pasando.

Estuvieron hablando y practicando, tanto descalzo como con zapatos altos, una clase bastante estricta, la cual tenía una verdadera razón y él no se encontraba en la posición de reclamar ni de quejarse, tenía solamente una semana para perfeccionarse. Ahora que lo pensaba más a detalle, mientras manejaba directo a su departamento ubicado en Seúl, la marca lo estaba considerando como un digno profesional o eso era lo que creía, igual de todas maneras, para apaciguar su inestabilidad emocional debía alegrarse con un granito de arena después de todo.

Ya se encontraba estacionando su auto negro en el subsuelo del edificio, uno bastante decente con algunos toques de lujo, como un amplio ascensor de tonos dorados y brillantes que te llevaban directo a tu piso de departamento. Su agencia era considerable a la hora de buscarle un hogar, ellos deseaban lo mejor para sus modelos y que mejor un lugar con una buena vista a la ciudad estrellada e iluminada de Seúl desde un séptimo piso. Tenía puesto una gorra de jean que hacía contraste con su vestimenta completamente negra, se había apoyado en el barandal del ascensor, sintiendo como subía y para su suerte, no se había detenido en los demás pisos.

Finalmente en su casa, sus pensamientos ansiosos seguían allí pero podía respirar mejor que antes al sentir el aroma que desprendía su hogar, como a maracuyá y durazno, un aroma tan intenso y dulce a la vez, sinceramente era su favorito. Era gracioso porque hacía contraste con la fachada de su intimidad, es decir, su casa se basaba en gris, blanco y negro, a veces usaba marrones o azules como para darle algún color visual pero por lo general ese no era el asunto. Lo que más se destacaba era que, al entrar a su hogar, te encontrabas con un sillón gigante, de cuero negro y con forma de L y frente a él un proyector donde casualmente miraba partidos de fútbol y una que otra serie. Para ese entonces dejó sus llaves del auto y de la casa en su respectivo lugar, al lado de la puerta de entrada y se sentó en el sofá.

Como si de una idea se tratase, aunque sabía que era parte de su ansiedad, decidió revisar las redes sociales, a través de su celular, una vez más hasta que se encontró con un portal de noticias del mundo de la moda, dando a conocer a los invitados de lujo para aquella celebración de lanzamiento.

— Jung Sungchan es bastante atractivo...

No habían muchos asiáticos como de costumbre, por el momento ese chico le había llamado la atención, se notaba que ese era más alto que él mismo y conste que nunca lo había visto en persona. Por otra parte, habían celebridades que él sabía lo influyentes que son al utilizar cualquier tipo de prenda de ropa, ese grupo le haría bien a la visual de la marca pero a su vez sentía que ver tantos nombres tan reconocidos y relevantes mundialmente lo matarían de taquicardia. Al terminar de leer cada nombre junto a su trayectoria en la moda, sintiéndose orgulloso de si mismo al verse entre tantas personas y leer maravillas de él mismo, se le da por entrar al link debajo del post que lo llevaba directamente al instagram de la página. A simple vista, el circulo de colores de historias estaba, no le costaba nada hacer click allí.

Primero eran historias promocionando el evento, otras mostrando un poco de spoilers de lo que se trataría la colección y otras eran publicaciones al lazar que no tenían que ver con el evento. Hasta que apareció una en específico que no pudo de dejar de verlo.

Era un chico sonriente, de pelo blanco o platinado quizás, sus labios tenían gloss o bálsamo haciendo que brillaran cada vez que hablaba hacia la cámara. Sos ojos también eran brillantes, simplemente era deslumbrante a simple vista, su presencia era hipnotizante. De forma inmediata, entra a su instagram y se encuentra con bastante contenido variado, como viajes por Europa, América, canjes con marcas y sobretodo veía mucha piel. Su primera impresión era la de pensar en que era un modelo para ropa interior o algo por el estilo, algo poco usual dentro de la industria y mucho menos que Ferragamo le haya dando una invitación extra como parte de invitados para hacer presencia dentro del evento, lo cual no modelaría como él pero si estaría presente.

— Na Jaemin, su nombre...

En ese momento no dejaba de ver todas sus fotos y lo bien que posaba para cada una de ellas. Cuando usaba anteojos eran de sus favoritas, sin dudas.

Jeno no era de admirar tanto a alguien ni mucho menos inflarlo, pero muy por dentro tenía muchas ganas de conocerlo, sentía que era una persona amigable así como él, fácil de hablar y que además tendrían temas en común. Podría ser un buen amigo y que además es muy atractivo como él, cumplía con esa vara. No veía la hora de que llegara el día del evento.

#S