Ya es hora de dormir, lo se bien por que los pasillos están oscuros.
Es extraño como mi nerviosismo examina cada situación. Siempre estoy alerta como un animal de la sabana al que quieren cazar.
Tal vez inconscientemente sé que alguien desea hacerlo, tal vez estoy loco.
Poso mi cabeza sobre la almohada, se siente bien.
Intento cerrar mis ojos y dormir pero recuerdo momentos.
Es muy suave, me recuerda a la de mi buen amigo. Una vez de campamento yo no traía almohada, el ofreció compartir la suya conmigo.
- Ven, te presto de la mía. - Dijo amablemente.
-Gracias. - Respondí raramente ante su actitud ya que suele ser alguien de malos modales.
A pesar de ello era una genial persona, siempre me dejaba copiar sus tareas en la clase de matemáticas. Esa materia no es lo mio. Me las pasaba a mi y a mi gran amiga, ella es genial.
Puedo contarle muchas cosas, lo que sea. Que lástima que en este año ella halla conseguido a alguien más, apenas recuerda mi nombre. No importa, su memoria está guardada.
Y que lástima que mi buen amigo halla muerto.
Así es, el solo se fue para no volver junto a mi.
Hay una canción que me recuerda mucho a él, siempre que pienso en el la melodía se pega en mi cabeza... " Daría mis ojos, para verte por última vez. Daría todas las yemas de mis dedos para poder tocarte. Y podría pintar la imagen de tu figura perfecta incluso si estuviera ciego"...
Se que suena para algo como un romance pero todos tenemos distintos puntos de vista.
Además a veces valen más las amistades que los amores, y más que las amistades la familia.
Recuerdo que una vez mi abuela hablaba con una señora a tempranas de la noche.
- ¿Que andas haciendo Susana?
-Comiendo, ¿Y usted?
- Comiendo... osea cenando.
-No, solo estoy comiendo. Para mi cenar es sentarse en familia junto a la mesa a comer.
No recuerdo más nada de aquella conversación pero... han pasado casi 7 años desde que la escuché y no la olvido.
A veces solo quisiera volver a abrazarla, todo fue tan injusto,
El cáncer solo actuó.
... ¡MIERDA! Ya casi son las 5 a.m debería dormir. Es tan estúpida la manera en la que me desvelo simplemente hablando conmigo.
Me gustaría saber si otras personas lo hacen o solo yo hablo tanto conmigo.
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El diario de la cordura pérdida.
Phi Hư Cấu¿Alguna vez te preguntaste como llega alguien a enloquecer? ¿Que pasa por la cabeza de esas personas? Podrás leer solo desde aquí todos esos pensamientos.
