¿14?

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- Seguro que quieres irte, puedes seguir viviendo con nosotros - dijo Mangel mientras ayudaba al teñido a hacer su maleta.

- Sabes que puedo solo Mangel, además no quiero incomodarlos cuando se pongan muy cariñosos - los otros dos se pusieron rojos ya que hace unos días habían tenido ganas y estuvieron a nada de hacerlo si no fuera porque Rubius había dejado caer "accidentalmente" un vaso.

- Bueno, pero llamanos si ocupas algo - dijo el pelirrojo cerrando la maleta.

- Tranquilos, no se van a librar tan facil de mi. Recuerden que ocupo ayuda para ordenar las cosas - salieron de la casa de la pareja para empezar a caminar en dirección al centro del pueblo ya que ahí se encontraba la nueva casa del híbrido, el cual llevaba a Coringa en una mano mientras que en la otra una maleta y Mangel y Lolito llevaban una cada uno también.

La casa era de un tamaño considerable, tenía una cocina muy amplia que conectaba con una pequeña sala de estar, contaba con una habitación principal y una para invitados, cada una con su propio baño y una sala de cofres subterránea. Desempacar no fue una tarea muy difícil y se dio cuenta que la mayoría de los objetos tienen en braille escrito lo que eran lo que le facilitaba mucho al híbrido a la hora de buscar las cosas que necesitaba, después de asegurarse de que todo estaba en su lugar se despidió de Lolito y Mangel asegurandoles que los llamaría si en algún momento necesitaba ayuda, cuando se fueron comenzó a pasearse por el lugar para intentar memorizarlo y después se tiró en su cama para pensar en su venganza contra Vegetta.

Podría parecer alguien muy calmado y pacifista y lo era la mayoría del tiempo hasta que se metían con él, eso era algo que no iba a permitir, tal vez lo hubiera dejado pasar si el azabache se hubiera disculpado o al menos dicho por que lo estaba tratando de esa manera, pero este solo lo ignoraba y cuando le hablaba podía sentir enojo, frustración y un toque de tristeza, se levantó de su cama y se dirigió a la sala de cofres, tendría que agradecerle a Mangel y Lolito por contarle tantas cosas de Karmaland y por enseñarle a hacer tantas cosas y a Luzu por haberle enseñado cada rincón del pueblo.

- Espero que con esto sea suficiente - dijo metiendo unos cuantos explosivos a control remoto en su mochila.

- Lolito, creo que descubri algo - ambos se encontraban en el sillón, el azabache sentado y el pelirrojo acostado con su cabeza en las piernas de su pareja mientras ésta lo acariciaba

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- Lolito, creo que descubri algo - ambos se encontraban en el sillón, el azabache sentado y el pelirrojo acostado con su cabeza en las piernas de su pareja mientras ésta lo acariciaba.

- ¿Qué descubriste mi niña?- dijo el pelirrojo sintiendo como Morfeo comenzaba a llamarlo a su reino.

- Creo que Rubius es de Karmaland o al menos creció aquí - el pelirrojo le dio un golpe mental a Morfeo y se levantó de golpe ahuyentado todo el sueño que sentía.

- ¿¡¿CÓMO?!? ¿¡¿CUÁNDO?!? - el azabache lo tomó de los hombros para que se relajara.

- Cuando ustedes se fueron, después de que Vegetta y Willy cayeran en las misan - hizo una pequeña pausa - dijeron que por nosotros es que se fue sin decir nada, creo, no, estoy seguro que ellos lo conocieron antes del "accidente" - esto dejo sin palabras a Lolito, que solo abría la boca y la cerraba, hasta que después de unos momentos habló con una gran sonrisa en su rostro.

¿𝚀𝚞𝚒é𝚗𝚎𝚜 𝚜𝚘𝚗? | RuwigettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora